MADRID 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
El servicio de vigilancia y socorrismo de Cruz Roja cerró este año la temporada oficial de playas habiendo rescatado a un total de 1.597 personas que se vieron en apuros, ya fuera mientras se bañaban o practicando algún deporte náutico. Esta cifra representa un incremento del del 27% con respecto al año pasado en que se prestó ayuda a 1.159 personas.
Los equipos de vigilancia y socorrismo de la organización atendieron a un total de 41.117 personas, un 4,8% más que en 2023, cuando la cifra al cierre de la temporada alcanzó las 39.166 personas atendidas.
Cruz Roja recogió estos datos desde el habitual inicio oficial de la temporada de playas en el mes de junio hasta esta misma semana, periodo en el que ha prestado servicio en un total de 142 playas en todo el territorio nacional, dos menos que el año anterior, pero en la que incrementó sus equipos de vigilancia y socorrismo hasta las 1.422 personas.
De las atenciones sanitarias dispensadas por los equipos de socorrismo de Cruz Roja en playas, 733 requirieron traslado a un centro sanitario para recibir atención médica, un 13% menos que en la temporada pasada.
Este año Cruz Roja localizó a 633 menores perdidos en las playas españolas en las que prestó servicio, cifra que en el pasado fue de 557 (un 12% inferior). En este tipo de incidencia, en las playas de orientación norte-sur, se da la circunstancia de que los equipos de vigilancia activan a todas las torres y empiezan a peinar la playa hacia el norte, dirección a la que suelen dirigirse instintivamente los pequeños que se pierden para no ser deslumbrados por el sol y poder así identificar más fácilmente a sus familiares.
Uno de los servicios fundamentales a los que Cruz Roja da también respuesta cada año a lo largo de la temporada es a la solicitud de personas con diversidad funcional para acudir a la playa a darse un baño seguro, actividad en la que el voluntariado de Cruz Roja ha acompañado a las personas solicitantes en 15.302 ocasiones este año, facilitándoles el baño en el mar con sillas anfibias y otros materiales y ayudas técnicas, acompañándoles desde su llegada a la playa.
Cruz Roja realizó también 148 rescates y asistencias a embarcaciones a lo largo de la temporada de playas, un 14% más que el año pasado, cuando dio respuesta a 127 incidencias de este tipo.
PREVENCIÓN
El responsable del servicio de Playas de Cruz Roja, Miguel Ángel Sánchez, pone de relieve "la importancia que tiene una de las prácticas más habituales y extendidas entre los equipos de vigilancia y socorrismo de Cruz Roja en todo el país, que es concienciar y prevenir de los riesgos existentes en cada caso a quienes acuden a disfrutar de un baño". A lo largo de la temporada, los equipos han informado de posibles riesgos a bañistas en 478.845 ocasiones en las 142 playas en las que ha ofrecido servicio.
Dichos avisos hicieron referencia en su gran mayoría a posibles corrientes en playa, del riesgo de zambullirse en zonas escarpadas, de roca o desde espigones, avisando a bañistas que ponen en riesgo su seguridad, saliéndose de las zonas de baño vigiladas en playas, zambulléndose en plena digestión tras el almuerzo, o previniéndoles sobre factores ambientales que pueden conllevar algún riesgo, como son los golpes de calor en playa, en especial si las personas acuden solas.