HUELVA 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Derecho a Vivir (DAV) ha anunciado este jueves que está analizando las opciones de interponer una denuncia contra la consejera de Salud de la Junta de Andalucía, María Jesús Montero, por una posible vulneración del derecho fundamental a la objeción de conciencia y un posible delito de omisión de auxilio, después de "haya ordenado dejar de alimentar a una anciana de 90 años desvalida e interna" en el hospital Blanca Paloma en Huelva.
En un comunicado, la portavoz de DAV, la doctora Gádor Joya, ha asegurado que han encargado "un dictamen jurídico sobre la base de los hechos conocidos de este caso" al entender "que pueden ser conductas ilícitas contra derechos fundamentales, tipificadas en el Código Penal", a lo que ha añadido su intención de presentar la denuncia "a lo largo de la próxima semana".
"La señora Ramona Estévez de 90 años está inconsciente después de sufrir un infarto cerebral y se encuentra hospitalizada en Huelva. Se alimenta por medio de una sonda nasogástrica, sin la cual morirá de inanición. Su familia asegura que la anciana pidió verbalmente no someterse a este cuidado y, asesorados por el lobby eutanásico Derecho a Morir Dignamente, su hijo ha pedido a la Junta de Andalucía que obligue a los médicos a retirar la sonda de alimentación", han manifestado desde la asociación.
En este sentido, la doctora ha matizado que "no es un tratamiento médico, sino un cuidado básico, como es la alimentación de toda persona. Si dejan de alimentarla, morirá, y no de una forma precisamente digna".
La portavoz de la asociación ha recordado que "muchos médicos y ciudadanos están preocupados por el empecinamiento del Gobierno en legalizar subrepticiamente la eutanasia". "Ya advertimos de que con la Ley andaluza de Muerte Digna y con el proyecto de la Ley nacional empezaríamos a ver muy pronto en España casos como éste: prácticas eutanásicas disfrazadas de decisiones compasivas, así como desatención de los cuidados paliativos a los que todo paciente tiene derecho y vulnerabilidad cada vez mayor del médico en el ejercicio de su libertad de ciencia y de conciencia", ha añadido.
La doctora Joya ha lamentado a su vez "el cinismo" de la ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, que, ante la polémica suscitada por la decisión de la consejera de Sanidad andaluza de dejar de alimentar a la señora Ramona Estévez, "volvió a invocar el consenso para sacar adelante el proyecto de Ley de Derechos de la Persona ante el Proceso Final de la Vida, más conocida como Ley de Muerte Digna".
"Es una pésima broma", ha asegurado Gádor Joya, "que la ministra hable de consenso cuando ha rechazado, de un plumazo, 34 de las 36 alegaciones presentadas conjuntamente por la Sociedad Española de Cuidados Paliativos y la Organización Médica Colegial".
La portavoz DAV ha interpretado que "la obsesión de este Gobierno con la muerte es pura ideología. No les interesa la calidad de vida de los pacientes, los cuidados paliativos que reciben, su idea fija es cómo seducir a la gente con la muerte y se trata de una pulsión verdaderamente inquietante y siniestra".