MADRID 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Sorteo Extraordinario de Navidad es una tradición que cada año une a millones de españoles en una ilusión. El 22 de diciembre, los hogares se llenan de emoción mientras las voces de los niños de San Ildefonso cantan los números premiados. Aunque comprar un décimo de Lotería de Navidad es una costumbre para muchos, todavía existen dudas sobre los tipos de boletos disponibles.
TRES FORMATOS DE DÉCIMO
Un décimo de lotería de Navidad no es más que un resguardo que acredita la participación en el sorteo con un número específico. Según explica la administración 'Lotería Valverde' en su web, existen tres formatos de décimo. Todos cuentan con la misma validez legal y las mismas posibilidades de ganar. Sin embargo, su diseño y formas de emisión varían, adaptándose a las circunstancias del vendedor o a las preferencias del comprador.
El décimo azul es el más reciente y llamativo de los tres tipos disponibles. Surge como una alternativa moderna, con un diseño más atractivo y reconocible para los jugadores. Este formato solo se puede emitir en administraciones que cuenten con impresoras especiales, por lo que es inusual.
El de toda la vida es el boleto preimpreso, a todo color y cuyo formato es el más antiguo de todos. Se puede conseguir en administraciones de venta exclusiva. Permite la reserva de números y, además, cuenta con una ventaja única: la posibilidad de comprar las 10 fracciones de un número en un solo papel.
Otro modo de emisión es la lotería impresa en terminal. Este tipo de décimo se emite bajo demanda a través de máquinas en cualquier punto de venta autorizado.
¿SON TODOS LOS FORMATOS IGUAL DE VÁLIDOS?
Sí, todos los formatos del décimo de la Lotería de Navidad son igualmente válidos para participar en el sorteo y cobrar un premio. Aunque puedan diferir en diseño o forma de emisión, como los décimos tradicionales en papel o los resguardos electrónicos adquiridos online, todos comparten las mismas garantías y pueden cobrarse en cualquier punto de venta oficial.
Al margen de su apariencia, lo esencial permanece: la validez y la seguridad de cada décimo están garantizadas.