MADRID, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) y la Universidad de Huelva han descubierto la relevancia científica del afloramiento granítico de Gerena, Sevilla, donde se mezclan dos tipos distintos de magma que entraron en contacto hace 340 millones de años y que su análisis ahora permite entender cómo es el magma que dio lugar a grandes cordilleras como los Andes.
Según un artículo publicado en la revista 'Scientific Reports', se documenta por primera vez la presencia de este material en la naturaleza que ya se había identificado de manera experimental. Se cree que estas intrusiones de tipo andino, generadas durante la subducción de un océano, son las que más cantidad de corteza terrestre generan, tal y como detalla el MNCN en un comunicado.
"Como se puede ver en las imágenes, el afloramiento está formado por dos magmas muy diferentes que están interaccionando: uno más oscuro, el magma parental, y otro más claro y con una textura completamente diferente. Se trata del tipo de granito que conforma la cordillera de los Andes, en Sudamérica", explica el investigador del MNCN Daniel Gómez Frutos.
Concretamente, en la formación de hace millones de años se encuentra preservado el magma que da origen a las formaciones graníticas de tipo andino, llamado parental.
Tras su generación en el manto terrestre, los magmas ascienden por la corteza hasta niveles superficiales, en que se estancan y se enfrían. Cuando se forma un nuevo pulso de magma, el magma nuevo puede llegar a entrar en contacto con el magma anterior, interaccionando con él. Eso es precisamente lo que ocurre en el afloramiento de Gerena, un lugar propuesto como geositio de interés científico al Instituto Geológico y Minero de España (IGME-CSIC).
"Debido a la diferencia de temperatura, cuando los dos magmas entran en contacto el más caliente se enfría bruscamente, congelándose. Esto preserva su composición original, previniendo la diferenciación", indica el profesor de la Universidad de Huelva Jesús de la Rosa, que también firma el artículo de 'Scientific Reports'.
Según especifican en el comunicado, las cordilleras como los Andes están sujetas a una intensa actividad tectónica que produce un magmatismo característico que puede encontrarse también en muchos otros lugares. Hasta ahora se había simulado cómo era el material de origen de estas rocas plutónicas --magma enfriado dentro la corteza terrestre--, pero nunca hasta ahora se había encontrado en la naturaleza, de ahí la relevancia del hallazgo en Sevilla.