Concentraciones de partículas respirables PM10 batieron récords a final de febrero de 2020 en Canarias y mediados de marzo 2022 en España y Portugal
MADRID, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
España sufrió las calimas de polvo sahariano más intensas desde que hay registros entre 2020 y 2022, según un estudio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de los datos del periodo 2000-2022 de 341 estaciones de calidad del aire de España y Portugal.
Así, puntos de Tenerife y Almería registraron valores cercanos a los 5.000 microgramos por metro cúbico (mgc/m3) y Gran Canaria, más de 5.250 mgc/m3. En comparación, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que la población no esté expuesta a valores superiores a 45 mcg/m3.
Las redes de calidad del aire disponen de analizadores de partículas respirables PM10 y PM2.5, que son las de diámetros inferiores a 10 y 2.5 micras, respectivamente. La concentración de estas partículas es un indicador de la calidad del aire.
Para llegar a la conclusión del estudio, los responsables, Sergio Rodríguez y Jessica López Darias, desarrollaron una metodología de reconstrucción de datos con la que hicieron frente a la saturación que experimentaban los equipos de medición de partículas PM10 en el transcurso de estas "supercalimas".
Con ella, reconstruyeron 1.690 horas de datos de partículas PM10 de 55 estaciones. Por esta parte, encontraron que entre 2020 y 2022 se registraron "supercalimas" en Canarias con concentraciones de entre 600 y 1.840 mcg/m3 de PM10, este último valor récord alcanzado en Gran Canaria. Tradicionalmente, las calimas intensas en el archipiélago han estado entre 200 y 400 mcg/m3 por 24 horas.
Mientras, las concentraciones de PM10 en España y Portugal continentales batieron récord histórico durante el episodio del 15 y 16 de marzo 2022, cuando llegaron a valores "propios del desierto del Sáhara".
De esta manera, se registraron valores de entre 1500 y 3100 mcg/m3 en Almería, de entre 800 y 950 mcg/m3 en Salamanca, Ávila y Valladolid, de entre 600 y 650 mcg/m3 en el centro de Portugal o de entre 440 y 480 mcg/m3 en zonas de Orense y el norte de Portugal, entre otros. En líneas generales, las concentraciones de partículas PM10 en la Península Ibérica durante episodios de calima suelen ser inferiores a 100 mcg/m3.
El trabajo, publicado en 'Atmospheric Chemistry and Physics', no aborda si estos episodios guardan relación con el cambio climático, pero sí que remarca que las "supercalimas" se producen bajo anomalías meteorológicas que afectan a todo el hemisferio norte.
En concreto, con anticiclones subtropicales desplazados hacia latitudes más altas, un cinturón tropical ensanchado y ondas de Rossby amplificadas --ondas atmosféricas de escala casi hemisférica que se propagan por el subtrópico y latitudes medias--. Según el CSIC, estas características recuerdan a las anomalías meteorológicas ligadas al calentamiento de la atmósfera causado por las emisiones de dióxido de carbono de la actividad humana, identificadas en estudios previos.
Las "supercalimas" de polvo desértico representan un fenómeno meteorológico extremo emergente que se registra desde 2018 con un primer episodio en el Mediterráneo Oriental al que le siguió, en junio 2020, la denominada 'Godzilla', que afectó al Caribe y Norteamérica. Posteriormente, en marzo 2021, tuvieron lugar dos episodios en China y, en noviembre de 2021, uno en Uzbekistán, todos ellos ligados a dipolos meteorológicos.
Estas "supercalimas" de polvo desértico se producen en un contexto paradójico, pues las emisiones de polvo en el norte África y Asia están disminuyendo a causa del descenso de la intensidad del viento atribuido al calentamiento global, lo que hace que la predicción a largo plazo de estos fenómenos sea extraordinariamente compleja.