MADRID, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), coincidiendo con la festividad del patrón de los periodistas, San Francisco de Sales, ha hecho un llamamiento a la sociedad para que defienda el ejercicio libre del periodismo bajo el amparo del artículo 20 de la Constitución.
"La libertad de expresión es la clave de bóveda de una sociedad democrática. Es una libertad que legitima varios derechos fundamentales, entre ellos la libertad de prensa y el ejercicio libre del periodismo sin censura previa alguna, además de garantizar el derecho de información de los ciudadanos", ha recordado la FAPE con motivo de la celebración de su patrón .
Por ello, la organización profesional entiende que "todo intento de restringir, coartar o limitar el artículo 20 es un ataque directo al corazón de la democracia y pone en riesgo la fortaleza misma del régimen de libertades".
En este sentido ha mencionado algunos intentos de recortar estos derechos, "derivados algunos de la nefasta 'ley mordaza' y las querellas de partidos y líderes políticos contra periodistas, y alentados otros por decisiones judiciales desproporcionadas e injustificadas, sin olvidar la elevada existencia de presiones que tratan de limitar la independencia".
Para la FAPE, el ataque "más grave" fue "la incautación del material y equipos de trabajo de los periodistas de Europa Press y Diario de Mallorca, Blanca Pou y Francisco Mestre, respectivamente, por orden del juez Miguel Florit, en el marco de las investigaciones del caso Cursach·.
En su opinión, la posterior retirada de la orden judicial y la devolución del material y equipos a los periodistas "no palió el grave daño causado a uno de los derechos y deberes fundamentales de los informadores".
Asimismo, ha mencionado decisiones empresariales que han llevado al cierre de medios de comunicación y se ha solidarizado con los periodistas afectados por estas decisiones. Lamenta también "el amarillismo y el sensacionalismo y el hacer un espectáculo de la información, con la consiguiente pérdida de prestigio y credibilidad".
Ante esta situación, la FAPE, en la festividad del 24 de enero, ha heho un llamamiento para la sociedad asuma que la defensa de la libertad de expresión por entender que no es un asunto que concierne solo a los periodistas y ha pedido a los ciudadanos una especial visión crítica hacia las llamadas "fake news" que se distribuyen de forma masiva por redes sociales.
También ha pedido a los partidos con representación parlamentaria que deroguen las normas de la "ley mordaza" que atentan contra el ejercicio libre del periodismo y se insta a modificar la ley vigente para que becas sean obligatoriamente remuneradas.
Otra de sus peticiones es la modificación del decreto que excluyó a los profesionales de la información del derecho a dar clases de lengua y literatura "con el peregrino e injustificado argumento de que el periodismo había pasado a ser considerada una carrera de Ciencias Sociales y Jurídicas en lugar de Humanidades".
La FAPE reclama, además, a los editores, para que mejoren las condiciones laborales de los periodistas y fotorreporteros, tanto de plantilla como de colaboradores y autónomos, acaben con la discriminación salarial y de promoción profesional de la mujer, respeten y remuneren los derechos de autor y dejen de utilizar becarios para ocupar puestos de trabajo estructurales.
A los jueces y fiscales, que recuerden que el secreto profesional de los periodistas es un derecho fundamental de la Constitución y que la jurisprudencia, en los casos de filtraciones, exime de este delito a los periodistas .
Otra de sus peticiones va dirigida a las facultades de Periodismo y Comunicación Audiovisual, con el fin de que adapten sus materias a las necesidades reales del mercado laboral, amplíen las plazas de profesores asociados y cumplan los convenios de prácticas.
Asimismo, instan a las las administraciones y empresas públicas a que sean ejemplares en su política de personal y contraten única y exclusivamente a periodistas titulados para las tareas de comunicación.
Y a los periodistas, para que promuevan el periodismo de calidad, basado en la difusión de información veraz, verificada, contextualizada, comprobada con las fuentes y respetuosa de los códigos éticos y deontológicos.