MADRID, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
Greenpeace ha exigido al Gobierno español que aumente "drásticamente" su objetivo de reducir las emisiones para el año 2030 y que lo fije en "al menos un 55% menos que las emisiones de 1990", para hacerlo compatible con el Acuerdo de París y para evitar superar el límite de 1,5C.
Así lo ha pedido la organización ecologista, tras hacerse público, este lunes, el informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la ONU (IPCC), primer informe integral que el IPCC presenta en nueve años y también el primero desde el Acuerdo de París.
En concreto, sobre España, Greenpeace avisa de que el gobierno "tampoco cumple" porque los objetivos actuales "siguen siendo insuficientes para cumplir con las recomendaciones del IPCC y con el Acuerdo de París". Por ello, espera que la justicia responda favorablemente al litigio climático que, junto con otras cuatro organizaciones, interpuso hace dos años y que está pendiente de resolverse.
"Tenemos que exigir al Gobierno español que actúe según la ciencia, según las recomendaciones del IPCC. Si no lo hace por voluntad propia, esperamos que la justicia le obligue a ello: que aumente drásticamente su objetivo de reducción de emisiones para 2030 y que lo fije en al menos un 55% menos que las emisiones de 1990, para hacerlo compatible con el Acuerdo de París y para evitar superar el límite de 1,5C", ha destacado el responsable de la campaña de Cambio Climático de Greenpeace España, Pedro Zorrilla.
Para la organización ecologista, el mensaje del IPCC es "incuestionable". "Se puede y se debe reducir a la mitad las emisiones globales de aquí a 2030", han subrayado desde Greenpeace, que ha asistido como observadora oficial a la reunión del IPCC que ha tenido lugar del 13 al 18 de marzo en Interlaken (Suiza).
Tal y como ha precisado la experta en política climática global de Greenpeace International, Tracy Carty, los gobiernos deben ponerse de acuerdo para "la eliminación justa y rápida del carbón, el petróleo y el gas". "No estamos esperando milagros: tenemos todas las soluciones necesarias para reducir a la mitad las emisiones en esta década, pero no lo conseguiremos a menos que los gobiernos decidan acabar con los combustibles fósiles", ha subrayado.
Además, la organización ecologista propone "obligar a los contaminadores a que paguen por los daños que causan a los países y comunidades menos responsables de la crisis climática" y que se establezcan "impuestos extraordinarios" a las "tremendas ganancias que las empresas energéticas han obtenido gracias al petróleo y el gas".
Por su parte, la científica senior de los Laboratorios de Investigación de Greenpeace en la Universidad de Exeter y parte del equipo oficial de la organización medioambiental en Interlaken, la española Reyes Tirado, ha destacado que el informe presentado este lunes en Suiza es un "manual de supervivencia".
"Las decisiones que tomemos hoy y todos los días durante los próximos ocho años garantizarán una Tierra más segura durante los próximos miles de años. La clase política y líderes empresariales de todo el mundo tienen que tomar una decisión: ser defensores y defensoras del clima para las generaciones presentes y futuras o villanos que dejan un legado tóxico para nuestros hijos y nietos", ha advertido.