Hugo Silva y María Valverde en 'El hombre de arena'

Actualizado: lunes, 12 noviembre 2007 15:18

MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los actores Hugo Silva y María Valverde conviven un centro psiquiátrico ambientado en Extremadura a finales de los años 60 en la película 'El hombre de arena' que dirige José Manuel González-Berbel y en la que también participan las actrices Irene Visedo, Ana Ruíz, Mercedes Sampietro y Ana Torrent.

"Encierran a Mateo (Hugo Silva) porque le encuentran que está molestando a algunos vecinos mientras toca la gaita. No era la época adecuada para un alma libre", explicó el director del largometraje durante la presentación de la película en Barcelona.

'El hombre de arena', que se estrenó el viernes en los cines españoles, retrata el cambio que sufre un centro psiquiátrico --especialmente Lola (María Valverde), una joven reclusa maltratada desde niña-- cuando un indomable trotamundos más cercano a la genialidad que a la locura ingresa en él.

"Lo que más me gusta de mi personaje es la curiosidad --de gran importancia para que el hombre evolucione-- y su capacidad de ser autodidáctica", explicó Silva que con esta película aborda por primera vez un papel protagonista en la gran pantalla.

El actor de 'Los Hombres de Paco' señaló que cuando leyó el guión se "emocionó" y le dijo a su agente que quería participar en las pruebas del casting, pero éste le comunicó que habían pensado en él para interpretar el personaje de Mateo.

La participación en esta película fue para Silva como "una bocanada de aire fresco", ya que se trata de "una época, un equipo y registro" distinto al de la serie que le lanzó a la fama. Asimismo, aseguró que la grabación de 'Los hombres de Paco' le permite hacer este tipo de incursiones en el cine que le exigen "mucha concentración".

González-Berbel, que también firma el guión de la película, explicó que se entrevistó con psiquiatras que ejercieron su profesión en esta época, además de leer muchos documentos acerca de estos centros. "Me he basado en hechos reales pero no los he trasladado a la gran pantalla, me han servido como marco", apuntó el director.

La película no pretende se "oscura" y cada espectador puede sacar su propia lectura. "No se conoce qué sucedía en esas instituciones, ahora se sabe un poco más", dijo González-Berbel al respecto.

Por su parte, Silva señaló que la Ley de Vagos y Maleantes, que sirve para encerrar al protagonista, "no forma parte de una época que esté tan lejos, ya que generaciones que todavía viven convivieron con ella". "Hay que mirar atrás para saber quién somos y entendernos", añadió.

Respecto la fama que le ha llegado en los últimos años, Silva aseguró que es "muy incómoda", pero dijo que va unida a este tipo de trabajo, además de que crea "situaciones graciosas y surrealistas".