MADRID, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las entidades promotoras de la iniciativa Iglesia por el Trabajo Decente, integrada por Cáritas, la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC), Juventud Estudiante Católica (JEC), Juventud Obrera Cristiana (JOC) y Justicia y Paz, ha reclamado este martes un "mayor compromiso" en favorecer el cuidado de los trabajadores.
Con motivo del Día Internacional de los Trabajadores, que se celebra este 1 de mayo, ha defendido la reducción del tiempo de trabajo como expresión del cuidado de las relaciones laborales. Además, ha destacado "las consecuencias en la salud de las condiciones de trabajo, con especial atención al impacto de la siniestralidad laboral, las dificultades para conciliar la vida personal y familiar y la cada vez más difusa barrera entre el tiempo de trabajo y el tiempo de ocio".
En este sentido, ha apuntado que, a su juicio, la falta de cuidado del trabajo tiene consecuencias en el bienestar de las personas y en la cohesión social que se traducen en "altos índices de estrés, ansiedad y depresión entre la población". "La salud laboral no sólo implica evitar los accidentes o las enfermedades que puedan afectar al ser humano en el ámbito del trabajo, sino también garantizar el bienestar de las personas al desarrollar su profesión", ha advertido la iniciativa eclesial en su manifiesto 'Cuidamos el trabajo para cuidar a las personas'.
En el manifiesto también ha recordado que el tiempo de trabajo supone entre el 40 y el 50% en la vida diaria de las personas con una jornada laboral de ocho horas al día, sin contar los desplazamientos, porcentaje que en muchas ocasiones se extiende por el incumplimiento de la desconexión digital.
En esta misma línea, hace alusión al mensaje del Papa Francisco en la Cumbre Mundial del Trabajo de la OIT de 2021, donde reclamó que el trabajo, como relación que es debe contemplar también "la dimensión del cuidado, porque ninguna relación puede sobrevivir sin cuidado", por lo que además de reconocer la importancia del trabajo de cuidados, llamó a extender, el cuidado, en primer lugar, a los trabajadores.
Además de reconocer la importancia de las tareas de cuidado, Francisco llama a promover el trabajo que cuida de la dignidad humana, la creación y la propia vida de las personas trabajadoras.
"Un trabajo que no cuida, que destruye la creación, que pone en peligro la supervivencia de las generaciones futuras, no es respetuoso con la dignidad de los trabajadores y no puede considerarse decente", advirtió Francisco, quien también insistió en que "un trabajo que cuida contribuye a la restauración de la plena dignidad humana, contribuirá a asegurar un futuro sostenible a las generaciones futuras".
Iglesia por el Trabajo pide además un mayor compromiso en favorecer el cuidado de las personas trabajadoras, para lo que expone que es necesario promover políticas que permitan una "conciliación real", así como apoyar el diálogo social para lograr la reducción del tiempo de trabajo.
También demanda que la salud laboral sea un derecho "fundamental" para todas las personas y sea "prioritario" en cualquier entorno. "Es hora de alzar la voz y reivindicar que la salud de las personas no se vea comprometida en aras del beneficio económico", sostiene.