MADRID, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las lluvias de finales de septiembre que provocaron las inundaciones y corrimientos de tierra que han dejado al menos 244 víctimas mortales en Nepal fueron un 10% más intensas por el cambio climático, según un estudio de World Weather Attribution (WWA) cuyos autores piden limitar el desarrollo en zonas bajas y ribereñas en el país y ampliar los sistemas de alerta temprana y acción temprana para evitar futuros desastres.
En concreto, la investigación ha sido elaborada por un grupo de 20 científicos que forman parte de la organización y que provienen de universidades y agencias meteorológicas de Nepal, India, Suecia, Estados Unidos (EEUU) y Reino Unido. Según ha detallado la organización, se han centrado en la región más afectada del país, incluyendo las provincias Gandaki, Bagmati, Madhesh y Koshi.
En el texto, han detallado que el cambio climático ha hecho que los aguaceros extremos de tres días en Nepal sean aproximadamente un 10% más intensos. Según han explicado, eventos similares serían extremadamente raros en un mundo 1,3ºC más frío. Sin embargo, hoy en día son un 70% más probables y se espera que tengan lugar de media una vez cada 50 años. Además, los aguaceros se están volviendo más intensos y, en líneas generales, el calentamiento global ha provocado que la lluvia sea un 10% más fuerte.
Asimismo, los científicos han destacado que hasta que el mundo reemplace los combustibles fósiles con fuentes de energía renovables, las ráfagas de lluvia pasarán a ser aún más intensas y conllevarán el riesgo de inundaciones más destructivas. Tal y como ha advertido la organización, estos hallazgos concuerdan "con un gran y creciente" conjunto de evidencia científica que resalta cómo una atmósfera más cálida, calentada por las emisiones de combustibles fósiles, puede retener más humedad, lo que resulta en aguaceros más fuertes.
Por último, los autores han incidido en que el rápido desarrollo empeoró en gran medida los impactos de la inundación y han recordado que Katmandú, la ciudad más grande de Nepal y uno de los distritos más afectados por las inundaciones, es construido alrededor del río Bagmati en un valle en forma de cuenco y ha experimentado un rápido crecimiento en últimas décadas. En su opinión, limitar el desarrollo en áreas urbanas propensas a inundaciones reducirá el número de personas en peligro y permitirá salvar vidas cuando se produzcan inundaciones en el futuro.