MADRID, 15 Sep. (EDIZIONES) -
España es el cuarto país de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con mayor porcentaje de 'ninis', jóvenes de entre 15 y 29 años que ni estudian ni trabajan. Una realidad que se ha disparado con la crisis económica.
Concretamente, el 22,8 por ciento de los jóvenes españoles de esa edad ni estudia ni trabaja, lo que coloca a España a la cabeza de la OCDE sólo superado por Turquía, Italia y Grecia, pese a que el porcentaje ha mejorado respecto a 2014 (25,8%).
La cifra española está bastante por encima de la media de la OCDE --34 países, que se sitúa en el 16,6% en 2015, y la de la Unión Europea (16,7%), según el informe 'Education at a Glance 2016' de la OCDE.
La realidad de los jóvenes que, por el motivo que sea, no estudian y tampoco tienen trabajo se ha disparado a raíz de la crisis hasta el punto de convertir a España en el país de la OCDE en el que más ha aumentado esta realidad desde 2005.
Otros países golpeados por la crisis como Grecia, Irlanda o Italia comparten la cabeza de este ranking con España. Mientras, Alemania, Israel o Turquía han logrado en este periodo reducir drásticamente su número de 'ninis', aunque el caso de Turquía es especial porque partía de un porcentaje muy elevado 43,6%.
LA DESIGUALDAD ENTRE HOMBRES Y MUJERES
Las dificultades que las mujeres tienen en muchos países para acceder a una educación o a un trabajo se aprecia claramente al comparar el número de 'ninis' por género en los distintos países. En Turquía, el país con una mayor brecha, el 42,9% de mujeres ni estudia ni trabaja, frente a un 15,10% de hombres.
Realidades similares viven las mujeres en países como Méjico, Colombia o Brasil, que junto a Turquía son los países con una mayor diferencia entre ambos géneros.
Esta realidad es constante, en distintos niveles, en la gran mayoría de los países de la OCDE, salvo en Austria y Suiza, donde hay un mayor porcentaje de 'ninis' hombres que mujeres y en Canadá e Islandia, donde no se aprecia casi diferencia.
España no es una excepción a la tendencia general en la OCDE y el porcentaje de mujeres que ni estudia ni trabaja es superior al de hombres, aunque la diferencia entre unos y otros es de las más bajas de la OCDE.
Lee aquí todas las conclusiones del informe.