Más de 100 religiosos fueron secuestrados, detenidos o asesinados en 2022, según la ACN

La ACN hace un llamamiento a todos los países implicados para que garanticen la seguridad y la libertad de sacerdotes, monjas y otros agentes pastorales
La ACN hace un llamamiento a todos los países implicados para que garanticen la seguridad y la libertad de sacerdotes, monjas y otros agentes pastorales - FUNDACIÓN A LA AYUDA NECESITADA
Publicado: viernes, 30 diciembre 2022 14:38

   MADRID, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -

   Más de 100 religiosos fueron secuestrados, detenidos o asesinados en 2022 según datos de la Fundación Ayuda a la Iglesia Necesitada recogidos en el 'Informe sobre los cristianos oprimidos por su fe 2020-2022'. El documento sitúa a Nigeria como el país donde más asesinatos y secuestros se han cometido.

   Así, el número de sacerdotes desaparecidos durante el año es 12, entre ellos cuatro en Nigeria, tres en México (asesinados por miembros de cárteles de la droga) y dos en la República Democrática del Congo. Cinco religiosas han perdido la vida, dos de ellas en Sudán del Sur y las otras tres en Haití, Mozambique y la República Democrática del Congo.

   Mientras, 42 sacerdotes han sido secuestrados en distintos países, de los cuales 36 han sido liberados. En Nigeria se han producido 28 secuestros en 2022, tres en diciembre y siete en julio. Tres de los secuestrados fueron asesinados, mientras que se desconoce la suerte de otros dos.

   En concreto, se desconoce el paradero del padre Hans-Joachim Lohre --misionero alemán y socio de un proyecto de ACN--, secuestrado en Mali en noviembre, mientras que el padre Joel Yougbaré, de Burkina Faso, y el padre John Shekwolo, de Nigeria, secuestrados en 2019, siguen desaparecidos.

   Por países, según el informe, después de Nigeria, Camerún es el país con más secuestros, un total de seis. Asimismo, cinco sacerdotes fueron secuestrados en septiembre y liberados cinco semanas después. Haití se ha convertido en uno de los lugares más violentos de Centroamérica, donde cinco sacerdotes han sido secuestrados por bandidos, todos ellos liberados posteriormente y en Etiopía y Filipinas tuvieron cada uno un sacerdote secuestrado, todos liberados.

   Además, en Nigeria se encuentran la gran mayoría de las monjas secuestradas en 2022, con siete casos. Una consagrada fue secuestrada en Burkina Faso, mientras que otra monja fue secuestrada en Camerún, junto con los cinco sacerdotes. Todas las religiosas fueron liberadas posteriormente.

DISCRIMINACIÓN Y PERSECUCIÓN

   Por todo ello, el director de Ayuda a la Iglesia Necesitada Italia, Alessandro Monteduro, ha explicado que las zonas donde los cristianos sufren más discriminación y a veces persecución se encuentran en África, en particular en el Sahel, en Chad, Níger, Malí, Burkina Faso y Nigeria, y también en el sur de Asia --India, Pakistán, Myanmar-- en Corea del Norte y China, donde ACN denuncia casos de detención forzada.

   Además, Monteduro ha añadido que en el 75% de los 24 países donde hay persecución religiosa ha aumentado la opresión contra los cristianos, así como contra todas las minorías religiosas, como por ejemplo en Burkina Faso.

   "Las organizaciones humanitarias ya no pueden llegar al 60% del país porque está bajo control de los terroristas, y las comunidades cristianas se han visto obligadas a abandonar los lugares donde vivían o se han trasladado a países vecinos", ha afirmado el director.

   Monteduro ha recordado que hay 400 millones de cristianos que viven en tierras de persecución y que, entre 2021 y 2022, casi 8.000 cristianos fueron asesinados por odio a la fe y fueron perseguidos.

   Por otro lado, al menos 32 clérigos han sido detenidos, presuntamente como medio de intimidación y coacción. Recientemente cuatro sacerdotes de la Iglesia greco-católica ucraniana fueron detenidos mientras realizaban actividades pastorales en Rusia, dos de ellos fueron liberados posteriormente y deportados a territorio ucraniano, los otros dos permanecen bajo custodia y podrían enfrentarse a cargos de terrorismo.

   La ACN ha querido hacer un llamamiento a todos los países implicados para que garanticen la seguridad y la libertad de sacerdotes, monjas y otros agentes pastorales que trabajan al servicio de los más necesitados.