MADRID, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los bosques de la mitad oeste, del medio este y del norte de España contienen áreas potenciales para realizar tareas de conservación y restauración del hábitat forestal, según un estudio realizado por investigadores de la Escuela Técnica Superior de la Ingeniería de Montes, Forestal y del Medio Natural (ETSIMFMN) de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM).
Para ello, el grupo de investigadores, también miembros del Centro de Investigación de Transporte (TRANSyT-UPM) ha cuantificado el grado de fragmentación de los bosques españoles a través de la medición de determinados atributos espaciales conocidos como 'Índices de Paisaje'.
Entre ellos, se encuentra la Densidad de Área Forestal (FAD por sus siglas en inglés), que permite distinguir entre áreas para conservación, caracterizadas por valores más altos de FAD, superiores al 90%, y áreas para restauración con un nivel de fragmentación de FAD medio-bajo, entre un 60% y 90%. En estas últimas zonas, las actuaciones de restauración serían menos costosas que otras con una mayor fragmentación.
De este modo, han determinado los escenarios de conservación de los bosques en España, cuyas áreas comprenden principalmente las que históricamente han estado menos desarrolladas industrialmente y las han dedicado a la agricultura y el uso forestal.
Asimismo, el estudio ha indicado que en estas regiones se encuentran extensiones muy grandes de bosques así como terrenos agrícolas, por lo que el relieve montañoso en gran parte o las grandes superficies de las dehesas de la mitad oeste son una posible causa de la ausencia de desarrollo industrial.
El trabajo concluye que las áreas potenciales para su restauración están dispersas, aunque concentradas en el entorno de las grandes áreas de conservación, por lo que según los investigadores, la rehabilitación de esta zona conllevaría un "importante beneficio ecológico" en comparación con otros terrenos aislados con la misma superficie.
Con toda esta información, los investigadores han diseñado unos mapas para mostrar la planificación forestal y conservación de hábitat en España, que además sirven como herramientas para localizar oportunidades de gestión "en un primer enfoque a gran escala".
En este sentido, el investigador del Departamento de Ingeniería y Gestión Forestal y Ambiental de la UPM, Sergio González-Ávila, ha subrayado la importancia en considerar el grado de fragmentación forestal dentro de los instrumentos de planificación y gestión de bosques como un factor más para incluir en los procesos de toma de decisiones.
Por su parte, la investigadora Belén Martín, ha destacado la utilidad de los mapas debido a que las potenciales áreas prioritarias representadas contribuyen a promover y mejorar la biodiversidad en general, así como las poblaciones de las especies forestales en particular.
"Los resultados supondrían un apoyo en la implementación de las líneas de acción de los principales instrumentos de gestión forestal y de la biodiversidad en vigor", ha añadido Martín.