MADRID 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Conferencia Episcopal Española (CEE) y Cáritas se han unido con el objetivo de animar a la sociedad a movilizarse y celebrar la VIII Jornada Mundial de los Pobres 2024, convocada por el Papa Francisco, este domingo 17 de noviembre.
Así lo ha indicado este lunes la CEE, que también ha recordado que este día es "una nueva oportunidad para reflexionar sobre cómo dar una respuesta adecuada que lleve alivio y paz a tantas personas, dejadas a merced de la incertidumbre y la precariedad".
Además, ha señalado que los promotores de la Jornada han propuesto pensar sobre cómo se puede "cuidar y alimentar la dimensión espiritual" de las personas a través de la oración, de una formación o de una lectura sugerente. También plantean la celebración de posibles encuentros de oración en la parroquia, en el centro de acogida, en las residencias junto con las personas participantes, facilitando algunas ideas inspiradas en el mensaje de la Jornada.
La CEE ha destacado que la idea de impulsar esta Jornada surgió el 13 de noviembre de 2016, durante el cierre del Año de la Misericordia y cuando en la Basílica de San Pedro el Papa celebraba el Jubileo dedicado a las personas marginadas. "Al finalizar la homilía, y de manera espontánea, Francisco expresó un deseo: 'quisiera que hoy fuera la Jornada de los Pobres'. Desde entonces, se celebra esta Jornada en torno a esa fecha", ha precisado.
Además, la CEE ha recalcado que la Jornada Mundial de los Pobres es una "oportunidad" pastoral que "invita a los creyentes a escuchar la oración de los pobres tomando conciencia de su presencia y de su necesidad". Por ello, ha afirmado que el Papa considera esta jornada como una ocasión propicia "para llevar a cabo iniciativas que ayuden concretamente a los pobres, y también para reconocer y apoyar a tantos voluntarios que se dedican con pasión a los más necesitados".
Precisamente, los obispos han explicado que el Papa Francisco ha propuesto como lema de este año 'La oración del pobre sube hasta Dios'. Este mismo día, presidirá la celebración eucarística en la Basílica de San Pedro en el Vaticano, a la que le seguirá el tradicional almuerzo con algunos pobres en el Aula Pablo VI.
El Papa también pide rezar con los pobres porque la falta de atención espiritual es "la peor discriminación que sufren" las personas en situación de exclusión. "Es un desafío que debemos acoger y una acción pastoral que necesita ser alimentada", señala en su mensaje.
"La inmensa mayoría de los pobres tiene una especial apertura a la fe; necesitan a Dios y no podemos dejar de ofrecerles su amistad, su bendición, su Palabra, la celebración de los Sacramentos y la propuesta de un camino de crecimiento y de maduración en la fe. La opción preferencial por los pobres debe traducirse principalmente en una atención religiosa privilegiada y prioritaria", añade.
Igualmente, recuerda a las personas que sufren la pobreza y la exclusión que Dios no se olvida de ellos. "Dios está atento a cada uno de ustedes y está a su lado. No los olvida ni podría hacerlo nunca. Todos hemos tenido la experiencia de una oración que parece quedar sin respuesta. A veces pedimos ser liberados de una miseria que nos hace sufrir y nos humilla, y puede parecer que Dios no escucha nuestra invocación. Pero el silencio de Dios no es distracción de nuestros sufrimientos; más bien, custodia una palabra que pide ser escuchada con confianza, abandonándonos a Él y a su voluntad", subraya.
Con el objetivo de animar la celebración de esta Jornada, la CEE y Cáritas han preparado diversos materiales para su utilización por parte de todas las diócesis, parroquias, comunidades, movimientos, asociaciones e instituciones de la Iglesia.