MADRID 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los obispos españoles han recibido con "alegría" la decisión del Papa Francisco de otorgar de forma permanente a todos los sacerdotes la facultad de absolver del pecado del aborto, una licencia que el Pontífice ya había concedido a los sacerdotes de todo el mundo durante el Año de la Misericordia y que ahora amplía.
"El Papa ya había dicho que se cerraba la puerta pero no la misericordia de Dios y uno de esos puntos es esa licencia que dio a los sacerdotes para perdonar pecados reservados como el pecado de aborto, que tenía esa pena especial. El Papa reitera y enfatiza la gravedad del pecado del aborto porque es matar la vida, a un ser inocente; pero dice que contra la misericordia de Dios no cabe ningún pecado, está abierta a perdonar siempre y a todos", ha subrayado este lunes 21 de noviembre el portavoz y secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), José María Gil Tamayo.
Al término de la reunión de la Asamblea Plenaria, el portavoz de los obispos ha asegurado que han recibido la noticia "con alegría" porque, como dice el Evangelio, "hay más alegría por un pecador que se convierte que por 99 justos que no necesitan penitencia". "Ese titular es de Jesucristo, nadie se lo puede apropiar pero es el que viene de verdad en esta situación ", ha añadido Gil Tamayo.
De esta forma, según ha recordado, aunque la puerta santa de la Basílica de San Pedro y del resto de templos jubilares se han cerrado físicamente, no lo ha hecho así la misericordia de Dios que "no tiene la puerta cerrada para nadie" y que el Papa Francisco quiere que los sacerdotes sigan llevando a cabo "para que nadie pierda la esperanza de que Dios le perdona".
En la carta apostólica publicada este lunes por el Papa Francisco con motivo del cierre del Año de la Misericordia, el Pontífice anuncia que extiende la autorización a los sacerdotes para perdonar el pecado del aborto. "Para que ningún obstáculo se interponga entre la petición de reconciliación y el perdón de Dios, de ahora en adelante concedo a todos los sacerdotes, en razón de su ministerio, la facultad de absolver a quienes hayan procurado el pecado de aborto. Cuanto había concedido de modo limitado para el período jubilar, lo extiendo ahora en el tiempo, no obstante cualquier cosa en contrario".