MADRID 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los obispos de la Subcomisión Episcopal de Migraciones y Movilidad Humana de la Conferencia Episcopal Española (CEE) han expresado su adhesión a la nota publicada este lunes por los obispos de Canarias en la que lamentan la "falta de previsión" para dar una acogida digna a los migrantes en las islas, ante la llegada a las costas canarias de más de 3.000 personas procedentes del continente africano, muchas de ellas menores de edad, y piden ser "puerto seguro".
"Expresamos nuestra adhesión a la nota de los obispos en Canarias y hacemos nuestros sus planteamientos, preocupaciones y propuestas", señalan los prelados, al tiempo que alientan y agradecen "el esfuerzo de quienes en la Iglesia y en la sociedad trabajan para hacer realidad las palabras del Papa Francisco en Marsella" para ser "cada vez más 'puerto seguro para los heridos de la vida'".
En concreto, en su nota, los obispos de las diócesis Canariense y Nivariense, José Mazuelos y Bernardo Álvarez, respectivamente, lamentan "la falta de previsión, unida a la insuficiencia de infraestructuras" en Canarias, lo que "dificulta una acogida digna y aumentan la probabilidad de que se produzcan vulneraciones de los derechos humanos" en torno a los migrantes que llegan estos días a las islas.
En esa línea, comentan en un comunicado conjunto que cientos de personas "han vuelto a dormir al raso" en los muelles canarios ante la falta de espacios de recepción, a lo que se une "la escasez de intérpretes, la ausencia de información jurídica comprensible o la asistencia grupal a las personas migrantes".
Por ello reclaman la apertura de "vías legales y seguras" para los migrantes, y en el caso concreto del archipiélago, más "solidaridad" al resto de comunidades autónomas pues "Canarias no puede afrontar sola esta contingencia".
Asimismo, han ofrecido "diálogo" a las administraciones públicas para buscar soluciones con el fin de "favorecer una acogida digna e integral" de los migrantes y que se cumplan todos sus derechos.
AGENTES DE SALVAMENTO MARÍTIMO, ÁNGELES CUSTODIOS
Los obispos hacen un llamamiento a sacerdotes, laicos y comunidades parroquiales a promover una "cultura de hospitalidad" con las personas migrantes y refugiadas, "sin excluir a nadie", y agradecen la labor de la Guardia Civil y Salvamento Marítimo en los rescates.
"Ellos son auténticos ángeles custodios en medio de nuestros mares y sería deseable que esa humanitaria labor de socorrer y salvar vidas siga contando en nuestra frontera sur con un apoyo decidido por parte de los diferentes gobiernos. A ellos hay que añadir la magnífica labor de la Policía Nacional, del personal de la Cruz Roja y de los Sanitarios que en la isla del Hierro están siendo en estos días auténticos samaritanos", comentan.
Igualmente señalan que se trata de seres humanos que
"arriesgan sus vidas cruzando el Atlántico con la esperanza de un futuro mejor para sí y sus familias" y les "entristece" contemplar la "indiferencia" de los gobiernos europeos, reunidos recientemente en Granada, "que por desgracia han declinado abordar y dar respuesta al preocupante tema de la migración".
Además, advierten de que los centros de acogida para menores de edad vuelven a estar "saturados" y las derivaciones a otras comunidades autónomas se encuentran paralizadas y tampoco se puede "olvidar la tragedia de quienes pierden la vida durante la travesía, dejando atrás sus sueños e ilusiones".
Los obispos han hecho suyo el mensaje del Papa Francisco en el que insta a evitar los "discursos alarmistas" sobre las migraciones --"aquellos que arriesgan sus vidas en el mar no invaden, buscan ser bienvenidos"-- y tienen claro que "cuando se acabe con la injusticia actual la migración se moderará".
En ese sentido apuntan que "hay que evitar migraciones no necesarias creando en los países de origen posibilidades concretas de vivir con dignidad" ya que no acometerían un "viaje tan incierto si
en sus pueblos y países se vivieran situaciones más justas".