MADRID 17 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Observatorio para la Libertad Religiosa y de Conciencia (OLRC) ha dado a conocer, coincidiendo con la Fiesta del Sacrificio, que la religión islámica ha recibido siete ataques contra la libertad religiosa en los primeros cinco meses del año. En todo 2023 se registraron una decena.
El primero de los ataques a los que se refiere el Observatorio se registró el 21 de enero con motivo de la concentración de vecinos de Lérida en contra de la construcción de un oratorio musulmán. En febrero, se se premitió a una mujer trabajar con velo en una residencia en Pamplona. Asimismo, el 7 de febrero, en un colegio de Lloseta (Islas Baleares), apareció una pintada que decía 'Muerte al islam'.
En marzo, los habitantes de Manacor, en las Islas Baleares, manifestaron su oposición a la construcción de una mezquita mediante la recolección de firmas y la colocación de pancartas de protesta. La comunidad islámica de Cataluña emitió un comunicado el 26 de marzo, expresando su preocupación por la falta de adaptación de la administración pública a sus especificidades.
Asimismo, el 3 de abril, una mezquita fue atacada en Cintruénigo (Navarra, donde vertieron orina y se encontraron una botella de alcohol rota en la puerta del oratorio y el 7 de abril, la Comisión Islámica de Melilla emitió un comunicado expresando su disconformidad con las afirmaciones contenidas en un informe policial, en el que se sugería que la cultura musulmana fomenta la comisión de delitos.
Ante estos hechos, María García, presidenta del Observatorio para la Libertad Religiosa y de Conciencia (OLRC), ha admitido la existencia de un incremento de ataques a la libertad religiosa en todas las religiones. Sin embargo, ha precisado, "entre las tres religiones principales, los musulmanes son los menos afectados, mientras que los cristianos son los más atacados cada año. Además, desde el 7 de octubre pasado, se observó un aumento del antisemitismo en España".
Por ello, el Observatorio para la Libertad Religiosa ha recordado, en el marco de la Fiesta del Sacrificio, que las Administraciones públicas y los políticos deben garantizar determinados derechos a la población musulmana como disponer de lugares de culto, según la normativa vigente y siempre que se respete la seguridad y que no se alienten, desde estos lugares, discursos que promueven el odio.
Asimismo, los alumnos musulmanes deben poder estudiar religión islámica en la escuela, cuando haya un grupo mínimo de 10 alumnos en los colegios y deben de poder contar con lugares de enterramiento conforme a sus tradiciones dentro del territorio español.