MADRID 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
La ONG Rescate ha lanzado una campaña de recaudación de fondos tras las inundaciones que han devastado el este de Etiopía y han dejado a la población sin acceso a alimentos, agua potable, refugio, educación y servicios de salud.
El pasado mes de agosto, entre los días 13 y 18, las lluvias torrenciales en las zonas altas de Etiopía provocaron inundaciones en la zona de Shebelle, al este del país, por el desbordamiento del río del mismo nombre, forzando el desplazamiento de cerca de 5.000 personas y dejando gravemente afectados a más de 14.000 hogares.
La ONG ha informado en un comunicado que este desastre ha agravado "la ya precaria situación humanitaria en la región, aumentando la urgencia de una intervención para salvar vidas y ayudar en la reconstrucción de los medios de vida de la población afectada".
En la actualidad 85.000 personas se enfrentan a una situación de inseguridad alimentaria crítica en Etiopía, debido a la destrucción de 11.458 hectáreas de cultivos de maíz, sorgo, sésamo y vegetales, ha avisado la organización.
NECESIDADES MÁS URGENTES
Tras las inundaciones, ONG Rescate ha analizado las necesidades más urgentes a las que se espera dar respuesta en los próximos meses y ha lanzado una campaña de recaudación de fondos con la que se pretende "asegurar el alimento a más de 85.000 personas, garantizar el acceso a agua y saneamiento a los 14.000 hogares afectados, proporcionar refugio temporal a cerca de 4.000 personas y asegurar el acceso a la educación de más de 7.000 niños".
Para lograrlo, se espera la distribución de alimentos y efectivo para garantizar la seguridad alimentaria de todas personas afectadas durante los próximos tres meses y la provisión de agua potable mediante la rehabilitación de pozos y sistemas de captación, así como la distribución de kits de tratamiento de agua. Asimismo, se construirán letrinas temporales y se distribuirán kits de higiene.
Por otra parte, el responsable del área de Cooperación Internacional de ONG Rescate, Francisco Fuentes, ha explicado que "el objetivo también es construir refugios de emergencia y rehabilitar los centros de salud y escuelas dañados por las riadas".
En concreto, la ONG trabaja en la región somalí de Etiopía, donde han sucedido las riadas, desde 2001, donde implementa tres proyectos con sus socios locales que trabajan principalmente en la adaptación al cambio climático mediante la creación y mejora de medios de vida, así como en la promoción de la igualdad de género.