ROMA, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha condenado la "violencia homicida" en lugares de culto tras los ataques en Nigeria, donde fueron asesinadas ocho personas y cerca de una veintena resultaron heridas en una iglesia durante la celebración de la misa dominical, y en República Centroafricana, donde el obispo de Bangassou, el misionero andaluz Juan José Aguirre, ha denunciado todo tipo de atrocidades.
"He quedado profundamente dolorido tras la masacre ocurrida el pasado domingo en Nigeria, en el interior de una iglesia, donde fueron asesinadas personas inocentes y en República Centroafricana donde se han perpetrado crímenes contra cristianos", ha señalado el Papa durante la audiencia general de este miércoles.
"Deseo que cese toda forma de odio y de violencia homicida y que no se repitan más crímenes así de vergonzosos, perpetrados en lugares de culto donde los fieles e reúnen para orar", ha señalado a este respecto.
Así, ha invitado a los fieles que estaban reunido en el Aula Pablo VI para seguir la catequesis semanal a recordar a las personas de Nigeria y de la República Centroafricana y a rezar "por todos ellos juntos".
El pontífice ha centrado la catequesis en el concepto de perdón como motor de la esperanza al tiempo que ha reseñado que la Iglesia está formada por pecadores. De este modo, ha criticado que algunos cristianos crean que son perfectos y desprecien a los demás por ello.
"Muchos católicos piensan que son perfectos y por eso desprecian a otros. Esto es triste", ha lamentado. "Los pecadores son perdonados. No solamente vienen aliviados a nivel psicológico porque son liberados del sentido de culpa. Jesús hace mucho más: ofrece a las personas que se han equivocado la esperanza de una vida nueva, una vida marcada por el amor", ha señalado finalmente.