MADRID, 19 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Papa Benedicto XVI ha criticado ante más de un millar de profesores universitarios jóvenes, reunidos en la Basílica de El Escorial, la visión "utilitarista" de la educación que cunde en la actualidad. "Sabemos que cuando la sola utilidad y el pragmatismo inmediatos se erigen como criterio principal, las pérdidas pueden ser dramáticas: desde los abusos de la ciencia sin límites, más allá de ella misma, hasta el totalitarismo político que se aviva fácilmente cuando se elimina toda referencia superior al mero cálculo del poder", ha dicho.
Por eso, mientras rememoraba sus primeros pasos como profesor en Bonn, cuando "todavía se apreciaban las heridas de la guerra" y las "muchas carencias materiales" se suplían con la "ilusión por una actividad apasionante", se ha preguntado dónde encontrarán los jóvenes esos puntos de referencia "en una sociedad quebradiza e inestable".
A estos profesores --la mayoría vestidos con las togas y birretes, como es habitual en los actos académicos-- les ha dicho que sienten un "anhelo de algo más elevado", les ha explicado que la Universidad, que "no es casualidad que promoviera la Iglesia", encarna "un ideal que no debe desvirtuarse ni por ideologías cerradas al diálogo racional, ni por servilismos de una lógica utilitarista de simple mercado, que ve al hombre como mero consumidor".
"He aquí vuestra importante y vital misión. Sois vosotros quienes tenéis el honor y la responsabilidad de transmitir este ideal universitarios, el ideal que habéis recibido de vuestros mayores", ha recalcado, también en presencia del ministro de Educación, Ángel Gabilondo, al tiempo que les ha dicho que deben sentirse "continuadores" de la historia de sus predecesores que, aunque distinta de la suya, sigue reclamando su atención en las cuestiones esenciales.
"AUTÉNTICOS MAESTROS"
Los jóvenes necesitan auténticos maestros, según ha subrayado Benedicto XVI, "personas abiertas a la verdad total en las diferentes ramas del saber" y "convencidas de la capacidad humana de avanzar en el camino hacia la verdad". "La juventud es tiempo privilegiado para avanzar en el camino hacia la verdad", ha añadido.
Y así, les ha animado "encarecidamente" a no perder nunca la sensibilidad e ilusión por la verdad, a "no olvidar nunca que la enseñanza no es una escueta comunicación de contenidos, sino una formación de jóvenes", en quienes deben suscitar "esa sed de verdad". Para ello, le ha indicado el camino hacia la verdad: inteligencia, amor, razón y fe. "Si verdad y bien están unidos, también lo están conocimiento y amor. De esta unidad se deriva la coherencia de vida y pensamiento, la ejemplaridad que se exige a todo buen educador", ha insistido.
Pero también les ha advertido de que la verdad está más allá de su alcance y que en el ejercicio intelectual y docente la humildad es "una virtud indispensable, que protege la vanidad que cierra el acceso a la verdad". "No debemos atraer a los estudiantes a nosotros mismos sino atraerlos y encaminarlos hacia esa verdad. A esto os ayudará el Señor", ha recomendado para concluir que los profesores arraigados en Cristo serán "buenos guías" de los jóvenes. También ha recordado el encuentro organizado la semana pasada por las universidades católicas en Ávila.
LA UNIVERSIDAD, UN ÁMBITO PARA EVANGELIZAR
Durante este encuentro con 1.500 representantes del mundo académico universitario, al que también ha asistido el ministro de Educación Ángel Gabilondo, uno de los docentes, el vicerrector adjunto al Rector y de Profesorado Universidad de San Pablo CEU, el profesor de Alejandro Rodríguez de la Peña, se ha dirigido al Pontífice para subrayar que la búsqueda de Dios y la disponibilidad para escucharle, "sigue siendo hoy el fundamento de toda verdadera cultura".
Asimismo, ha destacado que la condición del Papa de "insigne" profesor universitario le hace "especialmente sensible" a las inquietudes de los profesores católicos, "en una época en la que no resulta fácil vivir como cristianos coherentes en el ámbito universitario".
"Creemos que la Universidad es un ámbito maravilloso de evangelización de la juventud, donde los profesores católicos podemos anunciar el Evangelio y ser 'fermento de comunidades' que vivan en armonía y amor mutuo la fe, unida siempre a la búsqueda de la Verdad en el campo del saber humano", ha concluido Fernández de la Peña.
ENCUENTRO "PIONERO" EN LA HISTORIA DE LA JMJ
Por su parte, el cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, ha celebrado que esta reunión con los profesores sea un "acontecimiento pionero" en la historia de la Jornada Mundial de la Juventud y ha calificado de "brillante" la representación de los profesores universitarios allí reunidos.
"Saben de su preocupación por el presente y el futuro de una juventud que accede a la formación superior en la Universidad con unas expectativas profesionales y de concepción y de realización de sus proyectos de vida no siempre satisfechas y, no pocas veces, fallidas", ha advertido el cardenal.
No obstante, ha recordado que el Papa conoce la Universidad desde dentro, así como las "vicisitudes de todo orden" por las que ésta ha atravesado desde el final de la II Guerra Mundial hasta la actualidad, "tanto en el 'viejo' como en el 'nuevo mundo', en los países de Europa y de Sudamérica y en los de las demás regiones del planeta".