El Papa elogia a Enzo Bianchi, expulsado por el Vaticano de la comunidad que fundó, en el prólogo de uno de sus libros

ROMA 18 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Papa ha escrito el prólogo del libro 'Fraternidad' (Einaudi), de Enzo Bianchi, expulsado en mayo de 2020 de la comunidad Bose, que él mismo fundó, con un decreto del Vaticano firmado por el secretario de Estado, Pietro Parolin.

La publicación del libro de Bianchi coincide con la fundación de una nueva comunidad monástica, la Casa de la Madia, tras ser apartado de la comunidad Bose.

En el prólogo, el Pontífice elogia a Bianchi al señalar que "con su habitual profundidad humana e inteligencia espiritual, muestra que la fraternidad es la vocación de la humanidad".

"Todos somos hermanos en humanidad, mortales", señala el Papa. Además, en el prólogo del libro de Bianchi el Papa asegura que "el gran don que podemos acoger es el otro", sean este quien sea. "Si ponemos uno al lado del otro, siempre tenemos enfrente a un hermanos, a una hermana, y sentimos que tenemos una misma vocación: pasar de decir "yo" a decir "nosotros", para vivir juntos", añade.

ALEGATO CONTRA LA GUERRA

El Papa también aprovecha la ocasión para hacer un alegato contra "el demonio de la guerra", muy presente en la actualidad y "se manifiesta en la rivalidad que llega hasta la negación" y "el asesinato del otro".

Frente a esta realidad, señala que la fraternidad "debe regenerarse siempre y resistir a la rivalidad que conduce a la violencia y a la guerra", aunque reconoce que la sociedad actual carece en gran medida de esta actitud. "Sin fraternidad, la igualdad y la libertad seguirán siendo siempre valores amenazados, débiles y fácilmente contradichos", afirma.

El Pontífice señala que la fraternidad, en realidad, es una elección. A su jucio, se trata de elegir "el rechazo de la exclusión, la voluntad de reconciliación, el deseo de una profunda comunión humana".

Enzo Bianchi es un economista italiano y laico que al terminar sus estudios se retiró a la localidad italiana de Bosé para hacer vida solitaria. El 8 de diciembre de 1965, día en que concluyó el Concilio Vaticano II, fundó la Comunidad de Bosé. Después de una primera condena por parte del obispo local en 1967, por la presencia de protestantes en su comunidad, finalmente, la regla monástica de Bose fue aprobada por el obispo de Biella en 1973 y en la comunidad han permanecido unos 80 miembros.

Tras una visita apostólica ordenada por el Vaticano ante ciertos problemas de autoridad surgidos por las tensiones entre el fundador y el superior de la comunidad, en el año 2020, Bianchi, junto con otros tres hermanos, recibieron la orden de abandonar el monasterio de Bose mediante un decreto firmado en nombre del Papa Francisco por el cardenal secretario de Estado Pietro Parolin.