El Papa insta a damnificados del terremoto en Carpi en 2012 a salir de los "sepulcros de la tristeza y la desesperanza"

MADRID, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Papa ha instado a damnificados del terremoto en Carpi (norte de Italia) en 2012 a salir de los "sepulcros de la tristeza y la desesperanza" y les ha pedido que tomen "el camino del Señor, que es la resurrección y la vida".

"En medio de la desolación general por la muerte de Lázaro, Jesús no se deja transportar por el desconsuelo", ha señalado durante la misa que ha celebrado en la ciudad italiana donde está realizando una visita pastoral este domingo.

Francisco ha afirmado que en la vida existen dos vías: "quedarse mirando melancólicamente los sepulcros de ayer y de hoy, o hacer que se acerque Jesús a nuestros sepulcros". Por ello, ha invitado a no dejarse "aprisionar por las tentaciones de permanecer solos y desconfiados y llorando por lo que sucede". "No cedamos a la lógica inútil e inconcluyente del miedo, al repetir resignado que va todo mal", ha recalcado.

Y ha agregado después:"Cada uno de nosotros tiene ya un pequeño sepulcro, alguna zona muerta dentro del corazón: una herida, un mal recibido o hecho, un rencor que no da tregua, un remordimiento que regresa, un pecado que no se consigue superar". En este sentido, ha instado a no quedarse "solos en las grutas oscuras" sino tomar el camino de Jesús.

"Ésta es la atmósfera del sepulcro, el Señor desea abrir la vía de la vida, la del encuentro con Él, de la confianza en Él, de la resurrección del corazón", ha señalado.

El Papa ha reconocido que siempre "habrá problemas", pero ha esclarecido la manera de encontrar una nueva estabilidad "es el propio Jesús, que es la resurrección y la vida". "Con él la alegría habita el corazón, la esperanza renace, el dolor se transforma en paz, el temor en confianza, la prueba en ofrenda de amor", ha explicado.

Finalmente ha instado a no huir del sufrimiento del que ha dicho que "pertenece a esta vida" y a no encerrarse "en el pesimismo".