ROMA 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Papa Francisco ha pedido encontrar tiempo para "escuchar la palabra de Jesús" y "purificar los ojos para prepararlos para la vida eterna" durante la homilía de la misa celebrada esta tarde en la parroquia de Santa María de la Oración de Setteville, en Guidonia, en el sector norte de la diócesis de Roma.
En este sentido, ha explicado que a veces los ojos "están enfermos" porque ven "tantas cosas que no son de Jesús, cosas mundanas que no hacen bien a la luz del alma" y ha agregado que "sin saberlo" se termina "en la oscuridad" porque los ojos no están acostumbrados "a mirar a Jesús".
"El primer deber de un cristiano es nutrir su fe con la palabra de Jesús" ha sentenciado el Papa al tiempo que ha recordado que es la manera de que la "inteligencia" y el "corazón" vayan "hacia adelante en el camino de la esperanza".
En su quinta visita a una comunidad parroquial, el Pontífice ha invitado a leer un pasaje del Evangelio cada día para escuchar así la palabra de Dios. Francisco ha preguntado a los fieles si leían "un pasaje de Evangelio al día" o si por el contrario tenían miedo y falta de costumbre. De esta manera les ha sugerido llevar siempre un "pequeño evangelio y tenerlo en el bolsillo en el bolso" para así hacer el ejercicio de "imaginar cómo era Jesús". El Papa ha invitado a leer el Evangelio en el autobús "aunque a veces haya mantener el equilibrio o defender el bolsillo", ha bromeado.
Francisco puso de ejemplo a Santa Cecilia que "llevaba siempre el Evangelio con ella" y recordó que es el primer "paso para nutrir la fe".
El Papa Francisco salió del Vaticano a las 15:15 de la tarde y llegó a las 16:00 a la parroquia aproximadamente. El Pontífice saludó en la plaza a las personas que no habían encontrado sitio en la iglesia y antes de empezar la misa se encontró con enfermos y discapacitados, y después con niños que están recibiendo la catequesis de la Primera Comunión y con jóvenes que van a recibir la Confirmación. Se reunió también con miembros de la Comunidad Neocatecumenal y confesó a algunas personas. Al término de la misa se encontró con los familiares de los sacerdotes de la parroquia.