ROMA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha instado a todos los sacerdotes, religiosos y demás fieles a unirse este viernes a la consagración al Corazón Inmaculado de María, Rusia y Ucrania, que presidirá durante la celebración de la Penitencia en la basílica de San Pedro, porque la "Iglesia está llamada a interceder" por la paz.
"La Iglesia, en esta hora oscura, está fuertemente llamada a interceder ante el Príncipe de la paz y a estar cerca de cuantos sufren en carne propia las consecuencias del conflicto. En este sentido, agradezco a todos aquellos que están respondiendo con gran generosidad a mis llamamientos a la oración, al ayuno y a la caridad", ha asegurado en una misiva remitida a todos los obispos del mundo.
El Pontífice ha alertado de que el conflicto en Ucrania- que está a punto de cumplir un mes mientras continúan los bombardeos en varias ciudades del país- está causando "sufrimientos cada día más terribles en esa martirizada población, amenazando incluso la paz mundial".
En la carta, ha hecho un llamamiento a los representantes episcopales para que se dispongan "a invocar la paz renovados por el perdón de Dios", en la consagración al Corazón Inmaculado de María, Rusia y Ucrania que ha definido como "un gesto de la Iglesia universal" en este "momento dramático" lleva a Dios "el grito de dolor de cuantos sufren e imploran el fin de la violencia, y confía el futuro de la humanidad a la Reina de la paz".