ROMA, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Papa Francisco ha apuntado la posibilidad de que la Santa Sede forme parte del grupo de mediación sobre Venezuela, en el que también participan el expresidente español José Luis Rodriguez Zapatero; el expresidente de Panamá, Martín Torrijos; y el expresidente de República Dominicana, Leonel Fernández.
"En el grupo de la mediación, alguno, y no sé si el gobierno también, quiere un representante de la Santa Sede. Esto hasta el momento en que salí de Roma", ha indicado el Pontífice durante una rueda de prensa en el avión que le ha trasladado de Cracovia a Roma. Así, ha confirmado que han mantenido "contactos", si bien ha matizado no estar "seguro".
Por otro lado, sobre los últimos atentados terroristas reivindicados por el Estado Islámico, el Papa ha indicado que no le gusta hablar de violencia "islámica" porque también todos los días se conocen actos violentos de católicos, como los asesinatos machistas, y no por eso se habla de "violentos católicos".
"No me gusta hablar de violencia islámica, porque todos los días cuando ojeo los diarios veo violencias. Éste que mata a su novia, otro que mata a la suegra, y estos son católicos bautizados, son violentos católicos", ha señalado para defender que no todos los musulmanes ni todos los católicos son violentos sino que, como en "la macedonia, hay de todo".
A su juicio, "en casi todas las religiones hay un pequeño grupo fundamentalista". Por ello, considera que "no es justo ni es verdad que el Islam sea terrorista".
También ha apelado a la responsabilidad de las sociedades que dejan a los jóvenes "vacíos de ideales, sin trabajo, que caen en las drogas, en el alcohol y van allá y se enrolan en grupos fundamentalistas".
Sobre el intento de golpe de Estado en Turquía, ha explicado que no se ha pronunciado hasta ahora ya que con la información que ha recibido no está "seguro de lo que está pasando ahí". En todo caso, ha precisado que está analizando la situación con información de la Secretaría de Estado del Vaticano, de analistas y asesores y que, aunque siempre debe evitarse el mal a los católicos, no ha de hacerse "al precio de la verdad".
"Está la virtud de la prudencia, pero en mi caso, ustedes son testigos de que cuando tuve que decir algo que tocaba a Turquía, lo dije", ha añadido, en referencia a aquella ocasión en que se pronunció sobre el centenario del genocidio armenio.
Acerca de la acusación por abusos al prefecto de la Secretaría de Economía del Vaticano y miembro del G9, el cardenal australiano George Pell, Francisco ha pedido no realizar juicios paralelos.
"Si yo emitiera un juicio a favor o en contra del cardenal Pell no sería bueno porque juzgo antes. Es verdad, hay dudas, pero está el principio 'in dubio pro reo' (en caso de duda, se falla a favor del reo). Debemos esperar la justicia y no hacer nosotros un juicio antes, un juicio mediático. Cuando la justicia hable, hablaré yo", ha afirmado.
Finalmente, el Papa se ha referido a la caída que sufrió en una misa en Cracovia, ha recordado que fue como consecuencia del escalón y ha asegurado que se encuentra "fenómeno". "Yo miraba la Virgen y me olvidé del escalón. Estaba con el incensiario en la mano. Cuando sentí que caí, me dejé caer y esto me salvó, porque si hubiera hecho resistencias hubiera tenido consecuencias. Estoy bien, fenómeno", ha enfatizado.