Pide más recursos para la investigación sobre el alzhéimer
ROMA, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha mostrado su cercanía a los familiares de las víctimas y los afectados por las graves inundaciones del centro de Europa, al tiempo que ha instado a que se dediquen más recursos a la investigación sobre la enfermedad del alzhéimer.
"El próximo sábado, 21 de septiembre, será el Día Mundial del Alzhéimer. Recemos para que la ciencia médica pueda ofrecer pronto perspectivas de curación de esta enfermedad y para que se tomen cada vez más medidas adecuadas para apoyar a los enfermos y a sus familias", ha pedido Francisco.
Durante la audiencia general celebrada en la plaza de San Pedro, Francisco ha recordado también los países europeos que están afrontando en estas horas las consecuencias causadas por las inundaciones y ha mostrado su cercanía y oraciones por los que han perdido la vida y sus familias.
Además, ha pedido rezar por la paz y ha vuelto a asegurar que "la guerra es siempre un fracaso". De nuevo ha vuelto a pedir que a los fieles que se no olviden de Palestina, Israel, la martirizada Ucrania, Myanmar, y otros lugares del planeta donde se viven conflictos.
UNA IGLESIA "EUROCÉNTRICA"
Francisco ha dedicado la catequesis de la audiencia general --como suele hacer cuando regresa de un viaje-- a recordar los momentos más destacados del periplo de doce días por el sudeste asiático y Oceanía, la gira apostólica más larga de su pontificado. En primer lugar ha dado gracias al Señor "que me permitió hacer como Papa anciano lo que me hubiera gustado hacer como joven jesuita". Asimismo ha lamentado que en la Iglesia se sigue siendo "demasiado eurocéntricos" o, como se suele decir, "occidentales".
El Papa arrancó su viaje en Indonesia, donde los católicos apenas son el 3% de la población, pero allí encontró "una Iglesia viva, dinámica, capaz de vivir y transmitir el Evangelio en un país que tiene una cultura muy noble, proclive a armonizar la diversidad". En ese contexto, tuvo la confirmación de cómo "la compasión es el camino por el que los cristianos pueden y deben caminar para dar testimonio de Cristo Salvador y encontrarse al mismo tiempo con las grandes tradiciones religiosas y culturales".
El Papa atravesó junto al gran imán, Nasaruddin Umar, la mezquita de Istiqlal -la más grande del Sudeste asiático- el paso subterráneo que une la catedral de Yakarta con este templo musulmán. "Allí vi que la fraternidad es el futuro, es la respuesta a la anticivilidad, a las tramas diabólicas del odio y la guerra", ha señalado.
Francisco ha manifestado también su alegría por descubrir "una Iglesia misionera, en salida" en la segunda etapa de su viaje, en Papúa Nueva Guinea, donde las diferentes etnias hablan más de ochocientas lenguas, lo que para el Pontífice es "un entorno ideal para el Espíritu Santo, al que le encanta hacer resonar el mensaje del Amor en la sinfonía de los lenguajes".
El Papa ha confesado que se conmovió al escuchar las canciones y la música de los jóvenes y ha asegurado que en ellos vio "un futuro nuevo, sin violencia tribal, sin dependencia, sin colonialismo económico o ideológico; un futuro de fraternidad y de cuidado del maravilloso ambiente natural".
De su visita a Timor Oriental, donde el 98% de la población se declara católica, el Papa ha destacado "la fuerza de promoción humana y social del mensaje cristiano". Allí, la Iglesia ha compartido el proceso de independencia con todo el pueblo, "orientándolo siempre hacia la paz y la reconciliación", ha asegurado.
En todo caso, Francisco ha querido matizar que "no se trata de una ideologización de la fe" sino de la "fructífera relación entre fe y cultura" Por último, se ha referido a la ciudad- Estado de Singapur, que puso el broche final a su viaje.
El Papa ha destacado que en este lugar --el país asiático más rico desde el punto de vista económico- también existen los "pequeños" que siguen el Evangelio y se convierten en sal y luz, "testimonios de una esperanza más grande de aquella que los beneficios económicos pueden garantizar".