MADRID, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
Más de 20.000 hectáreas han quedado calcinadas por los dos incendios en Gran Canaria y Tenerife y han obligado a desalojar a cerca de 11.000 personas ante el avance de las llamas, según aseguró hoy el presidente de Canarias, Paulino Rivero, en una entrevista concedida a la Cadena Ser, que recoge Europa Press.
En Gran Canaria, las llamas han arrasado casi 10.000 hectáreas de pinar desde el pasado viernes, y han provocado la evacuación de 5.200 personas, una situación "dramática" que, según Rivero, requiere la ayuda del Gobierno, a quien --anunció--, pedirá "ayudas complementarias" que su gabinete ya ha anunciado prestará a quienes hayan sufrido pérdidas a causa de los incendios.
Los fuertes vientos, de hasta 70 kilómetros por hora, han dificultado las tareas de extinción durante la noche reavivando las llamas en la isla y aunque, explicó Rivero, "el viento ha amainado un poco" esta mañana, la situación es "bastante complicada" y "requiere la máxima atención".
Desde primera hora de la mañana, el fuego se concentra en el municipio de San Bartolomé de Tirajana, donde "lo que más preocupa es el brazo de fuego que va desde la presa de Ayaguare hacia Monte León y Montaña La Gata", apuntó. El objetivo es evitar que el incendio se extienda hasta el Pico de las Nieves y el Barranco de Santa Lucía.
En cuanto al fuego declarado ayer por la mañana en la isla de Tenerife, Rivero confirmó que "ha avanzado de forma más rápida debido al fuerte viento" y explicó que se encuentra repartido en tres frentes, el municipio de los Ralejos, Santiago del Teide y, "el más preocupante", los altos del Icoo, donde "hay muchos caseríos".
En total, se han calcinado 14.000 hectáreas y, sumando 3.700 personas que fueron evacuadas anoche por precaución ante el posible avance de las llamas, en total se han desalojado 5.700 vecinos de los distintos municipios afectados.
Respecto a las tareas de extinción, Rivero afirmó que Canarias "ha mejorado en los últimos años (...) y no cabe duda de que hoy se dispone de mejores medios y más preparación que hace unos años", sin embargo, apostilló, "en la lucha contra el fuego todos los medios son insuficientes".
En este sentido, explicó que en Tenerife están operando cuatro helicópteros cuando "sería deseable que se aportara alguno más", por lo que ya ha sido solicitado al Gobierno central. En Gran Canaria, trabajan 10 helicópteros y se espera la llegada del undécimo en las próximas horas.
"La orografía de las islas hace muy complicado combatir el fuego excepto desde el aire", apuntó el presidente canario, pero las altas temperaturas y las rachas de viento "impiden que los helicópteros normales puedan operar con garantías de seguridad" por lo que hacen falta naves adaptadas a la extinción.