Someterá a reflexión territorial una Ponencia Marco sobre el tema antes de emitir un dictamen definitivo previo a la discusión parlamentaria
MADRID, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
Unidos Podemos ha reiterado este lunes que se opondrá a cualquier regulación de la gestación subrogada que atente contra los derechos de las mujeres y los niños, una discusión que se abre de cara a la votación para la toma en consideración de la proposición de ley sobre esta cuestión que Ciudadanos (Cs) registrará este martes en el Congreso.
En un comunicado, el partido liderado por Pablo Iglesias ha apuntado una serie de principios básicos que, en su opinión, debería cumplir cualquier tipo de regulación sobre gestación subrogada o gestación por sustitución y que, en principio, considera que no se cumplen en el caso de la propuesta planteada por la formación naranja.
En cualquier caso, la portavoz del grupo parlamentario Unidos Podemos, Irene Montero, ha admitido este mismo lunes que en Podemos hay "diferentes opiniones al respecto" y es un tema que se está "debatiendo".
En este sentido, Podemos ha anunciado que redactará una Ponencia Marco dentro del proceso de debate y reflexión que como partido está realizando sobre esta cuestión y que someterá a opinión dentro de las áreas territoriales y círculos feministas. El partido emitirá entonces un dictamen definitivo previo a la discusión parlamentaria de la ley.
Según explicó el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, su partido presentará una ley "altruista y garantista", no remunerada y regulada por el Estado. Además, Ciudadanos plantea una edad mínima para las madres gestantes de 25 años y que los adoptantes tengan que ser españoles o residentes españoles.
Para Podemos, la gestación por sustitución no puede llamarse "altruista" cuando hay, de por medio, "compensaciones" económicas, por lo que estas deberían erradicarse --"no todo debe someterse a la ley del mercado", dice-- y, además, no es una técnica reproductiva sino un proceso biológico o "de vida", por lo que "la resignificación capitalista del trabajo reproductivo lo banaliza al mercantilizarlo y pone en peligro los derechos de las mujeres, niñas y niños de todo el mundo".
Además, la formación morada denuncia la "urgencia" del partido de Albert Rivera al considerar que responde a "una necesidad de regulación que permita a clínicas, agencias y otros agentes económicos mantener su tipo de negocio en España sin tener en cuenta la vulneración de derechos humanos de mujeres, niñas y niños que se cometen de forma fehaciente en muchos de los países donde está permitido contratar este tipo de servicio".
En consecuencia, traslada su negativa a adoptar un modelo que garantice la vulneración de estos derechos en España o en cualquier lugar del mundo y recuerda que organismos internacionales como la CEDAW o el Parlamento Europeo han alertado e instado a la prohibición de toda práctica gestacional que vulnere los derechos de las mujeres y las niñas en el mundo, especialmente en países en desarrollo (proveedores de madres gestantes) en los que se ha comprobado la comisión de delitos contra los derechos humanos y la vinculación de la gestación por sustitución con la trata de seres humanos.
Igualmente, el partido morado rechaza la "retórica familiar" de Rivera al plantear esta práctica "como progreso, futuro, novedad del tipo de familia en España", así como que el deseo de tener descendencia genéticamente idéntica sean derechos "en grado alguno" y "mucho menos equiparables a aquellos otros fundamentales que esta práctica vulnera".
Entre las 'líneas rojas' que plantea el partido figura la renuncia por contrato a ciertos derechos fundamentales como la interrupción voluntaria del embarazo, algo que la formación considera "inadmisible" tenga lugar el contrato en España o en cualquier lugar del mundo.