MADRID, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha cuestionado que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tenga la suficiente "credibilidad internacional" para que la tasa de transacciones financieras internacionales que ha propuesto para contribuir a financiar la lucha contra el hambre y la pobreza, tenga "buena acogida".
En declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, Cospedal ha explicado que la medida que el presidente español planteó ante la Asamblea General de la ONU "no es nueva" y ha remarcado la importancia de que sea admitida a escala internacional. Además, se ha mostrado de acuerdo con "la bondad" de la iniciativa teniendo en cuenta el "fin tan fantástico e importante" como es la lucha contra la extrema pobreza.
"El problema es que también se necesita una cierta credibilidad y un cierto respaldo y confianza para que ese tipo de propuestas tengan una buena acogida. No sé si Zapatero goza de esa credibilidad internacional", ha manifestado.
NO ENMIENDA LA PLANA A AGUIRRE
Cuestionada si al afirmar que los liberados sindicales no son un problema está enmendando la plana a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha negado que así sea y ha añadido que el "problema" es que se traten de utilizar derechos sindicales "en beneficio de unas organizaciones" y no a favor de los trabajadores. "No es una manera de enmendar la plana", ha remachado.
En este sentido, ha recordado que el PP está a favor de la reducción de las subvenciones a sindicatos y partidos políticos dentro de un plan de austeridad y ha criticado que esta propuesta que ya planteó el presidente de su partido, Mariano Rajoy, fue "tirada en el baúl de los recuerdos".
Ha remarcado que la Comunidad de Madrid plantea ahorrar horas sindicales "cuando no cumplan la legalidad". "Y de ahí, dentro de la legalidad, la Comunidad de Madrid tiene que tener libertad para actuar como corresponda", ha destacado.
La 'número dos' del PP también se ha referido a la huelga general convocada para el próximo 29 de septiembre y ha reclamado que se garanticen los servicios mínimos para que quien quiera "desarrolle su actividad normal" ese día pueda seguir haciéndola aunque sea con "una mayor complicación". "El Gobierno tendrá que ser el que aquilate ese decreto que al final tendrá que existir de servicios mínimos", ha concluido.