Religiosa española que participa en el Sínodo: "Ya no vale una Iglesia donde unos saben y otros ignoran"

Archivo - 04 July 2021, Vatican, Vatican City: Pope Francis delivers the Angelus prayer from the window overlooking St. Peter's Square at the Vatican. Photo: Evandro Inetti/ZUMA Wire/dpa
Archivo - 04 July 2021, Vatican, Vatican City: Pope Francis delivers the Angelus prayer from the window overlooking St. Peter's Square at the Vatican. Photo: Evandro Inetti/ZUMA Wire/dpa - Evandro Inetti/ZUMA Wire/dpa - Archivo
Publicado: martes, 1 octubre 2024 16:41

ROMA, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -

La religiosa de la Congregación de las Hijas de Jesús, Maria Luisa Berzosa, ha defendido que en una Iglesia sinodal, tema que centra las conversaciones de la segunda y última fase del Sínodo de los Obispos que arranca este martes con una vigilia penitencial presidida por el Papa, "ya no vale que haya unos que saben y otros que ignoran".

"Ya no podemos hacer como una iglesia en dos partes, que diferencia entre los que saben las cosas y los que las ignoran; quienes manejan las finanzas y los que no saben nada. Si hablamos de una Iglesia sinodal, significa que todos participamos, ya no vale que haya unos que saben y otros que ignoran", ha asegurado en declaraciones a Europa Press, al tiempo que ha defendido que la transparencia es uno de los principios deben implementar las diócesis con instituciones y sedes dedicadas específicamente a la rendición de cuentas.

La pastoralista y educadora española será facilitadora de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo 'Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión', que se realizará en el Vaticano del 2 al 27 de octubre de 2024. Es decir, será una especie de moderadora de los debates en uno de los grupos lingüísticos de lengua española que abordarán el futuro de la Iglesia católica.

En concreto, las discusiones se centrarán distintos temas -- enunciados en el documento presentado en julio llamado 'Instrumentum Laboris'-- como la implementación por parte de las diócesis de "procedimientos eficaces de rendición de cuentas" para prevenir los abusos sexuales o malas gestiones económicas o cuestiones relativas a la gobernanza eclesial, así como estrategias para implicar en mayor medida a todos los fieles, sin menoscabar la autoridad de los obispos.

"Uno de los temas que trataremos será la transparencia, no solo a nivel económico, sino a todo. Creo que, como iglesia universal, vamos avanzando, quizá lentamente, pero hay una mayor sensibilidad", ha asegurado.

No obstante, el Papa ha dejado fuera de las discusiones del Sínodo los temas más espinosos, como el diaconado femenino o el celibato obligatorio. En su lugar, diez grupos de trabajo llevan desde marzo examinando teológicamente estos contenidos. Por ejemplo, el cardenal arzobispo de Madrid, José Cobo, se ocupa junto a otros ocho expertos de la revisión de la formación de los seminarios en todo el mundo. Después, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe presentará a Francisco sus conclusiones antes de junio del 2025.

En cualquier caso, para la religiosa española son "temas de la vida" que "seguirán saliendo" porque "están ahí". "La Iglesia no puede sustraerse del momento vital y antropológico que lo vivimos", ha argumentado. En todo caso, considera que si bien "el ritmo con el que trabaja la Iglesia puede parecer lento", no se pueden "precipitar" las decisiones porque es importante "consensuar".

"No es bueno polarizar las cuestiones y plantear la realidad con categorías de blanco-negro porque hay muchos matices. La iglesia es universal y es un proceso complejo y, por lo tanto, lento", ha indicado.

Este martes, un día antes del arranque del Sínodo sobre el devenir de la Iglesia, el Papa presidirá una vigilia penitencial para "pedir perdón" por los pecados de la Iglesia y por todo aquello que le causa "vergüenza" en la basílica de San Pedro, según explicó el cardenal Mario Grech.

Al respecto, Berzoza celebra que la Iglesia pida perdón: "me parecía que una sinodalidad sin asumir estas faltas graves le faltaba algo". "No podemos pensar en una iglesia sinodal que no pida perdón. Hay abusos por todas partes, ya lo sabemos, pero pensábamos que la iglesia fuera el entorno seguro, el ámbito de confianza, donde pudiésemos descansar con nuestros sacerdotes. Por eso hemos roto la confianza y hemos perdido la credibilidad por todos estos abusos", ha agregado.

No obstante, incide en que también corresponde a la Iglesia "impartir justicia a las víctimas". "Tenemos que hacernos cargo y pedir perdón, pero para mejorar. El perdón no es solamente una cosa puntual; hay que modificar la conducta y esto lleva consigo un compromiso de cambio y transparencia", ha concluido.

Leer más acerca de: