MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
El cardenal arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez Pérez, ha sido reelegido como presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) este martes 14 de marzo de 2017 en el marco de la 109 Asamblea Plenaria de la CEE, y el cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha sido elegido vicepresidente. Se trata del mismo tándem que ya se dio en el trienio 2005-2008.
Blázquez ha obtenido el mayor número de votos por delante del cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, que ha recibido 20 votos; del cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, con cuatro votos; y del arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, que ha logrado un apoyo entre los 78 electores que han depositado su papeleta. Además, se ha contabilizado un voto en blanco.
El arzobispo de Valladolid consigue revalidar así su segundo mandato consecutivo, algo que no pudo hacer en 2008, cuando el entonces cardenal arzobispo de Madrid, monseñor Antonio María Rouco Varela, fue elegido presidente.
En su primera comparecencia ante los medios tras las votaciones este martes 14 de marzo de 2017, el cardenal Blázquez ha abogado por la "unidad" y ha defendido la reedición del tándem con Cañizares que ya formaron en el trienio 2005-2008: "No significa una vuelta atrás", ha enfatizado.
Ahora, Blázquez y Cañizares vuelven a ocupar los mismos puestos que ya ocuparan en el trienio 2005-2008. Blázquez ha obtenido en esta ocasión 52 votos, frente a los 60 que obtuvo en 2014 y a los 40 que obtuvo en 2005 para ser elegido presidente de los obispos (aunque el número de electores puede haber variado de un trienio a otro). Cañizares, por su parte, ha obtenido 45 votos, frente a los 41 que obtuvo en 2005 para ser vicepresidente. El último vicepresidente, el cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, obtuvo en 2014 un respaldo de 46 votos.
Además, la pugna por la presidencia estuvo más reñida en el trienio 2005-2008, ya que en la votación Blázquez obtuvo 40 votos frente a 37 de Cañizares. En esta ocasión, el arzobispo de Valladolid ha obtenido 52 y el de Valencia, 20.
En aquel momento, además, ambos accedieron a sus cargos sin ser todavía purpurados. Cañizares, entonces arzobispo de Toledo, fue creado cardenal por Benedicto XVI en 2006, mientras que el Papa Francisco creó cardenal a Blázquez, entonces obispo de Bilbao, en 2015.
Sobre sus primeras palabras a los obispos tras su reelección, Blázquez ha revelado que les ha dado las gracias por depositar su confianza en él de forma reiterada, se ha puesto a su disposición y les ha trasladado un sentido de "unidad". "Les dije: 'Estamos todos unidos por la ordenación sacramental, en concreto episcopal, y estamos unidos en la misma misión, que nos desborda a nosotros'", ha contado.
CON CARRERA DOCENTE Y EXPERIENCIA EN DISTINTOS OBISPADOS
Ricardo Blázquez Pérez nació en Villanueva del Campillo, provincia y diócesis de Ávila, el 13 de abril de 1942 y fue ordenado presbítero en febrero de 1967. Obtuvo el doctorado en Teología por la Universidad Pontificia Gregoriana de Roma y también estudió en universidades alemanas. Sus 21 años de ministerio sacerdotal se centraron en la actividad docente.
En abril de 1988 fue nombrado obispo auxiliar de Santiago de Compostela, en mayo de 1992 fue designado obispo de Palencia y en septiembre de 1995, obispo de Bilbao. Desde el 13 de marzo de 2010 es arzobispo de Valladolid.
En la Santa Sede, es miembro de la congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica; de Doctrina de la Fe y del consejo pontificio de la Cultura; de las Iglesias Orientales; miembro de la administración del Patrimonio de la Sede Apostólica y de la congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos.
Por su parte, Antonio Cañizares nació en la localidad valenciana de Utiel el 15 de octubre de 1945, obtuvo el doctorado en Teología en la Universidad Pontificia de Salamanca y fue ordenado sacerdote en 1970. También se dedicó especialmente a la docencia y llegó a ser el máximo responsable de San Dámaso.
El 6 de marzo de 1992 fue nombrado obispo de Ávila; el 1 de febrero de 1997 tomó posesión de la archidiócesis de Granada; entre enero y octubre de 1998 fue administrador apostólico de la diócesis de Cartagena y en octubre de 2002 fue nombrado arzobispo de Toledo y Primado de España. Desde agosto de 2014 es arzobispo de Valencia.
Antes de esto, el Papa Juan Pablo II lo nombró miembro de la Congregación para la Doctrina de la Fe, en noviembre de 1995, y Benedicto XVI le nombró en 2008 Prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, cargo que dejó al ponerse al frente de la diócesis de Valencia.