MADRID 20 Ago. (EUROPA PRESS) -
Benedicto XVI ha anunciado su determinación de declarar al patrón de los sacerdotes españoles, el santo español San Juan de Ávila, como doctor de la Iglesia universal tras oficiar misia en la Catedral de la Almudena en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) que se celebra en Madrid.
El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE),el cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, ha agradecido al Pontífice el anuncio en nombre de "los hermanos en el episcopado de España", de los sacerdotes, seminaristas y de "todos los fieles".
La CEE había promovido la causa del doctorado de San Juan de Ávila, que ahora tendrá que ser declarado doctor de la Iglesia universal en una ceremonia solemne en Roma cuando el Vaticano establezca una fecha. Rocuo Varela ha agradecido al Papa el "don tan grande que la Providencia divina otorga a toda la Iglesia" al nombrar doctor al patrón de los sacerdotes españoles.
San Juan de Ávila nació en 1499 en Almodóvar del Campo (Ciudad Real, España) en el seno de una familia acomodada, según la biografía del santo que la CEE colgó en Internet con motivo de su postulado al doctorado. Tras estudiar teología, ofreció su primera misa como sacerdote en 1526. Cuatro años más tarde es denunciado a la Inquisición por "haber sustentado proposiciones sospechosas en sus predicaciones" y encarcelado, para ser absuelto tres años más tarde.
Tras su puesta en libertad, predica en Córdoba, Granada y Jaén entre otros lugares. Fundó varios colegios y la Universidad de Baeza; escribió libros como 'Audi, filia', 'Tratado del amor de Dios', 'Tratado sobre el sacerdocio', 'Doctrina cristiana', y otros. Redactó las 'Memoriales' para el concilio de Trento, y se conservan de él numerosos sermones, pláticas y un abundante epistolario.
De reconocida sabiduría, amigo y apoyo de grandes santos como Teresa de Jesús, Ignacio de Loyola, Francisco de Borja, Juan de Dios, Pedro de Alcántara, Juan de Ribera, fray Luis de Granada y otros, fue una de las personas más conocidas y consultadas de su tiempo, según la CEE.
Muere en 1569 y en 1894 recibe la beatificación del Papa León XIII. Ya en el siglo XX, en 1946, el Papa Pío XII lo declara patrono del clero secular español y en 1970 recibe la solemne canonización del Papa Pablo VI.
Según explica la CEE, el punto decisivo para que un santo sea proclamado doctor de la Iglesia es que la suya haya sido "doctrina eminente". De acuerdo a esta definición, "un doctor de la Iglesia es, pues, quien ha estudiado y contemplado con singular clarividencia los misterios más profundos de la fe y es capaz de exponerlos a los fieles de modo que les sirvan de guía en su formación y en su vida espiritual".