BRUSELAS 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha querido mostrar su empatía y reconocimiento a las personas que han puesto voz a las "cientos de miles de víctimas" de abusos sexuales en la Iglesia, tras conocer el 'Informe sobre abusos sexuales en el ámbito de la Iglesia católica y el papel de los poderes públicos' presentado por el Defensor del Pueblo en el Congreso. El jefe del Ejecutivo se ha comprometido también a estudiarlo y a resarcirlos.
Según una encuesta de GAD3 recogida en el informe, un 0,6% de la población española mayor de 18 años, es decir, unas 236.000 personas, ha sufrido abusos sexuales en la Iglesia por parte de algún sacerdote o religioso y en total 1,13% de los encuestados asegura que la agresión se registró en el ámbito religioso, lo que elevaría la cifra a unas 445.000 personas. Estas proyecciones se acompañan con los testimonios 487 víctimas de abusos.
Sánchez se ha comprometido con ellos a seguir trabajando desde el poder ejecutivo y legislativo para poder resarcir "al menos mínimamente todo el sufrimiento que han vivido durante todos estos años de silencio".
"No existe de lo que no se habla y ha habido durante muchos años mucha gente que ha sufrido por no poder denunciar, explicarse, visibilizar dramas humanos", ha subrayado.
A su juicio, la presentación del informe hace "muy importante" este día para España porque se convierte en un país "un poco mejor". "Somos un país un poco mejor porque se ha dado a conocer una realidad que todo el mundo sabía desde hace muchos años, pero de la cual nadie hablaba o no hablaba en los términos que se ha empezado a hablar hoy", ha recalcado.
Además, ha definido el trabajo del Defensor como de "genuina regeneración democrática", "respetuoso con las víctimas", "profesional", y que ha entregado a la institución de la cual es comisionado, que es el Congreso de los Diputados.
"Lo que tenemos que hacer el resto de instituciones, en este caso en lo que a mí me corresponde como poder ejecutivo, es estudiar este informe y efectivamente ver y analizar las recomendaciones que hace el Defensor del Pueblo para actuar en consecuencia", ha añadido para asegurar que este no es el último día sino el primero de otros muchos que tienen que ver, si no con la reparación, que es imposible, al menos con un ejercicio de empatía de la sociedad española y las instituciones públicas.
Finalmente, Sánchez ha admitido que las agresiones sexuales a menores son uno de los graves problemas que tuvo y tiene la sociedad y ha recordado la aprobación en la pasada legislatura de la Ley de Protección a la Infancia. "Hoy nuestra democracia es una democracia mejor y nuestro país es un poquito mejor y eso creo que si hay que reconocérselo a alguien es precisamente a las víctimas de estas agresiones y comprometernos desde las instituciones públicas en darles una respuesta", ha concluido.