MADRID, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
Una testigo que estuvo en el andén de la madrileña estación del Cercanías de Embajadores, en Madrid, cuando en enero de 2015 murió un policía tras ser arrojado a las vías por un hombre ha afirmado en el juicio que lo sucedido fue "accidental", en contra de la versión de la fiscal y de la familia de la víctima.
Ali Raba Yode, natural de Costa de Marfil, declaró ayer en el juicio que no recuerda nada de lo que pasó y aseveró ante el tribunal que "no asesinó a nadie", insistiendo su defensa en que el crimen no fue intencionado. El procesado está postrado en una silla de ruedas como consecuencia de las graves lesiones que sufrió al caer también a las vías a la llegada del convoy.
Este mediodía la testigo, Sara D., ha relatado que ese día había quedado a comer con sus hermana y que para llegar utilizó el Metro, entró en la estación y en la planta intermedia escuchó gritos.
"Cuando me acerqué estaban dos policías pidiendo la documentación a un chico y el chico preguntaba qué había hecho, que por qué le pedían documentación si no había hecho nada, que qué estaba pasando. Yo me paré porque había mucha tensión y le pregunté a un policía que había hecho (el procesado). Sigue tu camino, me contestaron", ha explicado.
Pero ella se quedó allí viendo lo que ocurrió, siguiendo los movimientos de los tres protagonistas cogiendo la bici con la que había accedido a la estación. "Le intentaron agarrar, no lo consiguieron y el chico se puso a la bajada de las escaleras mecánicas. Le obligaron a bajar las escaleras, a la fuerza, agarrado cada uno (de los policías) por un brazo para llevarle a la planta de abajo", ha indicado la joven ante las preguntas de la fiscal.
Ya en el andén, la compareciente ha indicado que se colocó cerca de un máquina expendedora, y desde allí vio la escena de los hechos. "Él salió corriendo y la policía y lo agarraba. El chico se intentó soltar y es cuando cae a las vías", ha afirmado antes y después de ver dos pequeños vídeos del momento del suceso, en los que se ha reconocido como una de las presentes.
EL TRATO "NO FUE EL CORRECTO"
La testigo ha insistido en varias ocasiones que el trato dado por los agentes al procesado durante la detención en el Metro "no fue el correcto".
"Se estaba viendo una situación muy tensa. Con la gente que hablaba decía que se veía venir. Las dos partes estaban tensas y creo que hubiese sido mejor que se hubieran quedado en la planta intermedia. No le insultaron pero le dijeron que le iban a detener. Las maneras no me parecen correctas porque cuando te piden la documentación está bien que te digan por qué. No hubo puñetazos, pero sí golpes y un forcejeo durante la petición de documentación", ha apuntado
A continuación, la fiscal le ha preguntado si ella no figuraba entre los nombres que la Policía facilitó tras lo ocurrido. "Cuando pasó todo eso estaba todo el mundo en shock. Era una situación muy tensa y había bastante caos", ha dicho.
"Hablé con un policía y le dije que yo lo había visto. Llamé a mi hermana, intenté volver a dar mis datos pero no me los cogieron porque era todo muy tenso. Después de esto fue a mi casa. Tengo un amigo de un amigo que está estudiando a derecho y su hermana conocía al abogado del acusado", ha agregado.
En otro momento del juicio, la fiscal ha puesto en entredicho que la testigo hubiera comprado el billete de Metro el día de autos. Después de que afirmara que "en principio había comprado" un billete sencillo para acceder ese día por la mañana a las vías, la responsable del Ministerio Fiscal ha destacado que, tras consultar con Renfe los datos del billete proporcionado por la testigo indican que fue comprado pasadas las 16 horas y no por la mañana, que es cuando ocurrieron los hecho.
La mujer ha respondido que no se acuerda cuando compró ese billete y si la comida con su hermana era comida, merienda o cena, pero que le extrañaría que el billete proporcionado no fuera el que ella utilizó porque se acuerda bien que lo compró, ya que "desde ese día no he vuelto a coger el tren". Es más, ha añadido que no se saltó los tornos y que sí compró el billete ese día.
Más adelante, ha sido el turno interrogatorio del abogado de la acusación particular de la familia del agente fallecido, que le ha preguntado a la testigo si era consciente de que ese día en Atocha hubo una suceso protagonizado un ciudadano marroquí que amenazó con inmolarse en Atocha y de que, por tanto, había justificación para que la Policía pidiera la documentación a quien estimara oportuno. No obstante, estas preguntas y otras similares han sido vetadas por la magistrada por improcedentes.
Eso sí, la testigo ha respondido que no ha tenido problemas con la Policía y aunque ha sido identificada en alguna ocasión no ha acabado detenida. El abogado también le ha preguntado si pertenece a algún movimiento antisistema, una pregunta que ha provocado la repulsa de los acompañantes de la compareciente.
Por último, ante las preguntas de este abogado y el de la defensa, Sara D. ha insistido en la hipótesis del "accidente". "Yo lo que veo es a una persona intentado soltar a la otra. Él (el procesado) estaba de espaldas. Por eso no sabe donde está el anden y cae. Llevaba agarrada una bolsa de comida en una mano", ha indicado, reforzando así la versión de la Defensa del detenido.
En el día de hoy también han declarado varios policías que llegaron tras lo ocurrido, que han aportado información de cómo encontraron al fallecido y al herido y otros detalles de la escena del presunto crimen. Pero el testimonio relevante ha sido el del compañero del agente que unos meses antes, el 21 de octubre de 2014, tuvo un altercado con el acusado. Así, ha declarado que le intentó arrojar sin éxito a otras vías del tren, por lo que Alí fue condenado por atentado, lesiones y resistencia a la autoridad.
Según su relato, cogió de la muñeca a su compañero e intentó tirarle a la vía cuando pasaba el tren gritándole: "Te voy a tirar a las vías, puto madero. Venid a por mí hijos de puta". Pero el agente pudo zafarse de sus manos y luego ambos le cogieron de piernas y brazos en volandas "mientras les escupía". El juicio por este caso prosigue mañana con varios testigos más.