MADRID, 17 Dic. (EUROPA PRESS) - Localizan y trasladan a una comisaría de los Mossos a un sospechoso islamista de origen holandés Agentes de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional han detenido este lunes en Vitoria a I.Z., de 36 años y nacionalidad argelina, por su presunta integración en la organización terrorista DAESH. Se trata del presidente de la Asociación Cultural para la Orientación y el Desarrollo de la Comunidad Argelina en Euskadi, según han confirmado a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista. La Policía considera que, aprovechando su cargo, I.Z. extendía consignas yihadistas y destinaba ayudas sociales para el retorno de terroristas y ayudar a los que continúan en Siria. La Asociación Cultural defiende en sus estatutos la defensa de los intereses sociales, profesionales y culturales de las personas asociadas desde una perspectiva "no lucrativa y apolítica". También orienta para la obtención de ayudas sociales públicas y trata de "desterrar estereotipos y prejuicios de actitudes y conductas discriminatorias o xenófobas". En el arresto y registro del domicilio de I.Z. han colaborado la Brigada Provincial de Información de San Sebastián y la Brigada Provincial de Información de Vitoria, según ha informado el Ministerio del Interior. El arrestado utilizaba su posición como presidente de una asociación cultural para lograr mayor influencia entre la comunidad islámica y destinar los recursos económicos que obtenía al retorno de yihadistas y a ayudar a quienes siguen en Siria. En concreto, los investigadores consideran que pretendía emplear parte de las ayudas sociales que recibía en formar a una persona en el manejo de herramientas 'on line' para propagar las consignas de DAESH. Además, amenazó con un arma blanca a los agentes policiales que le identificaban al grito de "voy a matar policías" y en otra ocasión agredió a una pareja de policías, siendo detenido por atentado a la autoridad. El arrestado en Vitoria alardeaba en su círculo más cercano de su autoformación en la confección de artefactos explosivos caseros y manifestaba que "hacer una bomba es muy fácil, no tiene importancia". La investigación, que ha contado con la colaboración del Centro Nacional de Inteligencia y Europol, se ha desarrollado bajo la supervisión del Juzgado Central de Instrucción Número 2 y la coordinación de la Fiscalía de la Audiencia Nacional. El detenido recibía ayudas económicas por desempleo mientras obtenía recursos de un negocio propio encubierto de venta por Internet. En su labor de alienación remota, las pesquisas policiales indican que su intención era destinar estas ayudas sociales al mantenimiento de adoctrinados que después apoyarían su idea de reconstruir el caído califato de DAESH. La Policía ha rastreado los últimos cuatro años en Euskadi de I.Z., acreditando que entre sus proyectos estaba crear una escuela para adoctrinar desde la infancia a los niños musulmanes que acudiesen a ella. El 17 de enero de 2017, la Policía Nacional detuvo en San Sebastián a Mehdi Kacem, un marroquí de 26 años que se radicalizó hasta el extremo de liderar una célula yihadista con información para volver a atentar en Francia. La radicalización se produjo a pesar de que contó con el apoyo de una ONG local, Kolore Guztiak, que le ayudó a conseguir los papeles para que viviera del boxeo y de la fontanería gracias a ayudas sociales de la Diputación de Guipúzcoa. La Comisaría General de Información de la Policía Nacional ha intensificado en las últimas semanas el rastreo de aquellos imanes considerados radicales para aplicarles expedientes de expulsión de acuerdo a la Ley de Extranjería, siempre que se entienda que representan una amenaza para las seguridad nacional.