La Corporación municipal hispalense guarda un minuto de silencio durante el pleno en memoria del difunto
SEVILLA, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un proceso vírico habría desencadenado la muerte del electricista de 59 años de edad que, desde hace casi dos semanas, permanecía ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Virgen del Rocío tras haber sufrido un accidente laboral en las obras de ampliación del palacio de exposiciones y congresos de Sevilla, cuya Corporación municipal ha interrumpido el pleno ordinario que este viernes estaba celebrando al objeto de guardar un minuto de silencio en memoria del trabajador fallecido.
Según informó el Ayuntamiento, promotor de estas obras que ejecutada la unión temporal de empresas (UTE) formada por Acciona, Inabensa y Heliopol, la muerte de este trabajador derivaría de un proceso vírico contraído en una de las operaciones a las que fue sometido en los últimos días. El área de Economía y Empleo del Consistorio, dirigida por Carlos Vázquez (IU-CA), manifiesta sus más sentidas condolencias y su solidaridad a los familiares y a los compañeros de este operario que, como se recordará, cayó al vacío cuando realizaba tareas de instalación de cableado en el recinto.
El minuto de silencio guardado durante el pleno ha rendido homenaje también a la muerte de otros dos trabajadores en sendos accidentes laborales ocurridos el jueves de la semana en curso.
El primero de ellos tuvo lugar en Torredelcampo (Jaén), donde un varón de 49 años fue aplastado por una viga en una nave de ferralia. La otra víctima, de 28 años, era el topógrafo encargado de preparar los terrenos para la construcción de una planta termosolar de Abengoa situada en el término municipal de El Carpio (Córdoba). Falleció al intentar cruzar el río Guadalquivir en su vehículo todo terreno.
Con el de este viernes, son 275 los minutos de silencio que se han secundado en el Ayuntamiento de Sevilla y más de 382 los andaluces que, lamentablemente, han perdido la vida en el tajo desde que el Pleno del Ayuntamiento de Sevilla aprobase esta iniciativa en marzo de 2005, bajo el lema 'No más muertes en el trabajo'.
Esta medida busca sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de poner freno al grave problema de la siniestralidad laboral, haciéndolo visible cada vez que se produce un muerto por este motivo en la comunidad autónoma. En lo que va de año son ya 28 las concentraciones llevadas a cabo y 40 los trabajadores andaluces que han fallecido en su puesto de trabajo.