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MADRID, 28 Feb. (EP TURISMO) -
Andalucía es uno de los destinos turísticos de referencia en España, por sus costas, pero también por sus montañas, así como su fauna y flora. Como cada 28 de febrero, esta tierra conmemora la celebración del referéndum sobre que dio autonomía plena a la comunidad andaluza en 1980.
Aprovechando el Día de Andalucía, desde EP Turismo destacamos ocho localidades rurales no tan conocidas en la Comunidad, pero que no te puedes perder en cada una de las ocho provincias andaluzas: Almería, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén, Málaga y Sevilla.
1. ALMERÍA: Serón, por sus jamones
Aunque Almería es más conocida por sus 200 kilómetros de playas y su Parque Natural de Cabo de Gata, esta provincia goza de gran atractivo para los amantes de la montaña. La Alpujarra almeriense, la Sierra de los Filabres y la Sierra de María esconden espectaculares paisajes de montaña, cruzados por caminos forestales ideales para la práctica de senderismo.
Entre los municipios de montaña más bonitos desconocidos y singulares destaca Serón, fundada por los nazaríes en el siglo XIII como fortaleza defensiva y que jugó un importante papel durante las guerras moriscas del siglo XVI por su estratégica situación, siendo puerta oeste del Reino de Granada al Valle del Almanzora.
Serón presenta una estructura piramidal con calles estrechas y sinuosas que nos llevan hasta la parte más elevada, la cual aparece coronada por su castillo nazarí. Sus casas encaladas se descuelgan por la ladera creando un bello y pintoresco paisaje.
Este año, Almería celebra la Capital Gastronómica de España y para los entendidos en sabores, Serón es referencia obligada, por su tradición artesanal con el jamón y los embutidos en toda su pureza, así como por sus vinos, de los viñedos propios del Valle del Almanzora.
2. CÁDIZ: El balcón a la sierra de Arcos de la Frontera
La Sierra de Cádiz conserva el espíritu de Al-Ándalus con sus yacimientos arqueológicos, cuevas prehistóricas y antiguos castillos medievales. Entre los pueblos blancos de Andalucía destaca Arcos de la Frontera, famosa por sus miradores, tanto para ver el pueblo como los alrededores.
Este pueblo blanco, localizado en la cima de una colina en la Sierra de Cádiz y a 65 kilómetros de la capital, presume de arquitectura con sus siete iglesias, así como sus conventos y capillas, sin olvidar otros monumentos como las casas-palacios.
Imprescindible es visitar el castillo, una fortaleza reformada entre los siglos XIV y XV que durante el periodo musulmán fue alcázar militar, y que conserva del primitivo alcázar un gran arco de herradura en la vieja entrada del Poniente.
3. CÓRDOBA: Pedroche y sus encinas
Situado en el Valle de los Pedroches, en plena Sierra Morena cordobesa, Pedroche ofrece un paisaje de campos de dehesas de encinas dedicadas a la ganadería extensiva de cerdo ibérico y ovino, su principal actividad económica.
Este pueblo, territorio más septentrional de la provincia de Córdoba y de Andalucía, está asentado en una pequeña loma, de calles armoniosas, estrechas y empinadas, con una bonita estampa en la que destaca la torre de la Iglesia del Salvador en granito.
Se cree que esta localidad data del prerromano, si bien, fue durante la dominación árabe, cuando se conocía como Bitraws, cuando se convirtió en la población más importante de la cora de Fash al Ballut (Valle de las bellotas).
4. GRANADA: Lanjarón y sus aguas termales
En la provincia de Granada, se ubica Lanjarón en el escalón ente el Mediterráneo y el Parque Natural de Sierra Nevada. Se trata de una parada obligada en los pueblos alpujarreños para los amantes de las aguas termales.
Esta localidad, famosa por su
balnearia y por la calidad de sus aguas medicinales, goza una arquitectura singular en sus viviendas, perfectamente adaptadas a lo quebrado del terreno y a la climatología de la zona, que se ordenan en estrechas calles donde perdura la memoria de su pasado morisco.
5. HUELVA: Aracena y su gruta de las maravillas
La localidad de Aracena, que da nombre a la sierra y al Parque Natural, es uno de los espacios protegidos más importantes de la Comunidad de Andalucía. Lo más conocido es su Gruta de las Maravillas, uno de los complejos cársticos más interesantes de España.
Aracena ocupa todo el norte de la provincia con sus dehesas de bosques de encinas, alcornoques, castaños y monte bajo, por donde cursan numerosos arroyos, conformando un paisaje de extraordinaria belleza y atractivo.
Su casco urbano, repleto de monumentos y declarado Bien de Interés Cultural, se ubica al pie de su antiguo castillo y de la Iglesia Prioral de Nuestra Señora del Mayor Dolor, que conserva el alminar de la mezquita que le precedió.
6. JAÉN: Aldeaquemada y sus pinturas rupestres
La provincia de Jaén es la puerta de Andalucía, situada al noreste, justamente en la cabecera del río Guadalquivir, a caballo entre Sierra Morena y las Cordilleras Béticas.
Además del conjunto monumental de Úbeda y Baeza, la provincia esconde otra localidad con un rico patrimonio: Aldeaquemada, con sus pinturas rupestres de "arte sobre roca" declarados Bienes de Interés Cultural. Estos yacimientos únicos son museos al aire libre realizados por el hombre primitivo de hace más de 4.000 años.
Además, muy cerca de esta zona, se encuentra otro gran reclamo turístico el paraje natural de la Cimbarra, una cascada de agua de unos 40 metros de altura con agua cristalina de sierra.
7. MÁLAGA: Las calles escondidas de Tolox
Tolox descansa en una ladera de la Sierra de las Nieves, con el Torrecilla de telón de fondo. En sus calles laberínticas se esconden talleres artesanos donde se trabaja la madera entre las casas blancas típicas de esta zona andaluza.
El origen de Tolox se remonta al Neolítico, si bien, destacan sus restos fenicios y romanos. Destacan así las murallas del Castillo, actualmente la construcción más antigua de la localidad.
El 'barrio alto', la parte más elevada del pueblo, es la zona más pintoresca de Tolox, con sus fachadas encaladas en las empinadas cuestas con rincones llenos de flores.
8. SEVILLA: Pruna y la serranía
La Serranía Suroeste Sevillana se encuentra enclavada entre la Campiña y las Sierras Subbéticas, una zona llamativa por sus paisajes con llanuras onduladas se mezclan con las primeras encrespaciones del borde meridional del valle del Guadalquivir.
El municipio de Pruna se sitúa en el Pico de Terril, la cumbre más alta de la provincia. Llaman la atención las fuentes y antiguos abrevaderos, que aparecen por las estrechas calles, desde las que se contemplan monumentales casas, con balcones y patios llenos de macetas, así como el Castillo del Hierro, donde gruesos muros encierran viejas leyendas.