MADRID, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Mesa del Turismo de España se muestra optimista respecto al avance paulatino en la reactivación económica en el sector del turismo y la tendencia positiva de las reservas de cara a la próxima temporada, pero alerta de ciertas "amenazas" que podrían truncar la ansiada recuperación, como la subida del precio de los combustibles, la insuficiente dotación policial en los puestos de control de pasaportes o la subida de la cotización de los contratos temporales, entre otros aspectos.
La organización mantiene las previsiones realizadas en la pasada feria de turismo Fitur para la temporada primavera/verano 2022 dentro de un optimismo moderado y confía, con algunas cautelas, en que el repunte de las reservas permita que la recuperación se consolide en el segundo semestre del año.
"A pesar de la incertidumbre que genera la guerra en Ucrania, que sin duda retrasará la recuperación y muy probablemente reducirá el poder adquisitivo después de dos años de una inesperada pandemia, constatamos que el incremento de las reservas para la Semana Santa (y la primavera y el verano) inducen a la confianza entre los operadores turísticos", asegura la organización.
En su opinión, es muy posible que los turistas europeos elijan España como su destino vacacional, lo que se sumará a un nuevo crecimiento del turismo doméstico. Y es que las aerolíneas tienen programada para la temporada veraniega una oferta de plazas hacia los aeropuertos españoles que en algunos casos iguala e incluso podría superar a la de 2019.
Todos estos son factores positivos que juegan a favor de la recuperación del turismo de forma moderada. No obstante, la Mesa del Turismo de España advierte de determinadas amenazas "que hay que atender con urgencia porque podrían afectar negativamente al panorama y
revertir el buen pronóstico".
Entre estas amenazas figura, en primer lugar, el incremento exponencial del coste de los suministros energéticos. "Los precios desbocados de la luz, el gas y el petróleo exigen una intervención del Gobierno sin demora", advierte la organización, reclamando medidas para rebajar el coste energético al igual que lo han hecho otros países europeos.
Según alerta, "el conjunto del sector turístico está soportando unos sobrecostes del combustible y la energía que dificultan restaurar la competitividad del turismo español".
Las cifras de IATA muestran que el combustible de la aviación ha aumentado un 4% en este mes de marzo en comparación con enero, y un 57% en comparación con febrero de 2021. El combustible puede representar hasta el 35% de los costes operativos de las aerolíneas.
A esto se suma que, ahora desde Bruselas, en el marco del Pacto Verde Europeo se pretende poner en marcha medidas que obliguen a las aerolíneas a pagar por lo que emiten, además de un nuevo impuesto al
queroseno o la obligación para las aerolíneas de repostar con combustibles sostenibles, que ya de entrada tienen un coste más elevado.
En opinión de la mesa de Turismo, todo ello repercutirá en el precio del billete para los viajeros, con el agravante de que el 80% de los viajeros que llegan a España lo hacen por vía aérea.
INSUFICIENTE DOTACIÓN POLICIAL.
Otro problema latente, del que la Mesa ya avisó meses atrás, es la insuficiente dotación de personal de la Policía Nacional en los puestos de control de pasaportes de los aeropuertos con mayor tránsito internacional.
Según la organización, si no se pone remedio, "se volverá a provocar una situación de colapso en estos aeropuertos, con colas interminables y viajeros perdiendo sus conexiones" y esa imagen internacional no es conveniente para España.
Otra cuestión que preocupa al sector es la subida de la cotización de los contratos temporales, que penaliza por ejemplo al ámbito ferial y al turismo MICE. Por ello, reclaman una exención de la norma para estas actividades que, por su propia naturaleza, se desenvuelven en un marco de temporalidad, pero que son un efectivo multiplicador de la riqueza para las ciudades.
Por otro lado, la Mesa del Turismo sigue reclamando la elaboración de un PERTE específico para el sector que cifran en una cantidad aproximada de entre 12.000 y 15.000 millones de euros.
En relación con el empleo, también les sigue preocupando la falta de trabajadores cualificados, especialmente en la hostelería y hotelería, y una política de formación adecuada.
Por todo ello, insta a trabajar y a dedicar los esfuerzos en la promoción de España "como destino seguro y de calidad" y conseguir restablecer la confianza de los mercados internacionales para volver a alcanzar las cifras prepandemia.