MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
La segunda aerolínea de bandera de Arabia Saudí, Riyadh Air, ha encargado 39 787-9 Dreamliners de alta eficiencia, con opciones para 33 aviones más, para impulsar su lanzamiento mundial y apoyar su objetivo de operar una de las flotas "más eficientes y sostenibles del mundo".
Según el comunicado de Boeing, este acuerdo forma parte del plan estratégico más amplio de Arabia Saudí para transformar el país en "un centro mundial de aviación". El objetivo es dar servicio a 330 millones de pasajeros y atraer a 100 millones de visitantes anuales para 2030.
En total, las aerolíneas saudíes tienen la intención de adquirir hasta 121 787 Dreamliners, en lo que será el quinto mayor pedido comercial por valor en la historia de Boeing.
"Nuestros nuevos aviones 787-9 servirán como base para nuestras operaciones en todo el mundo, a medida que construimos la red más amplia y conectamos a nuestros huéspedes con Arabia Saudita y muchos destinos en todo el mundo", ha explicado el consejero delegado de Riyadh Air, Tony Douglas.
El 787-9 proporciona el mayor alcance de la familia de aviones 787, con un vuelo de aproximadamente 300 pasajeros a 7.565 millas náuticas (14.010 kilómetros), con capacidad de carga adicional, junto con una reducción de emisiones del 25%.
NUEVA AEROLÍNEA CON BASE EN RIAD
Propiedad del Fondo de Inversión Pública (PIF) de Arabia Saudí, la nueva aerolínea tendrá su centro de operaciones en Riad y en el país esperan que marque "el comienzo de una nueva era en el sector de los viajes a escala mundial".
Riyadh Air estará presidida por el gobernador del PIF, Yasir Al-Rumayyan, mientras que el anterior consejero delegado de Etihad Airways, Tony Douglas, ha sido designado como consejero delegado de la nueva compañía.
Arabia Saudí calcula que la aerolínea aporte 20.000 millones de dólares (18.600 millones de euros) al crecimiento del PIB no petrolero y cree más de 200.000 puestos de trabajo directos e indirectos.