LISBOA, 29 May. (EUROPA PRESS) -
La convocatoria de paros de los pilotos de TAP, del 1 al 10 de mayo, provocó unas pérdidas de 90 millones de euros para el sector turístico de Portugal, según estimaciones de la Asociación de Hostelería de Portugal (AHP), cifra inferior a las primeras previsiones anunciadas, de hasta 300 millones de euros en caso de que el 100% de los trabajadores la secundara.
Las nuevas estimaciones del sector incluyen el impacto negativo en la aerolínea bandera del país, inmersa en un proceso de privatización para la venta de TAP, con dos candidatos en la mesa, el norteamericano y director ejecutivo de Azul, David Neeleman, y el brasileño-polaco propietario de Avianca, Germán Efromovich.
La AHP suma a estas pérdidas el 5% de reservas irrecuperables en hoteles lusos, según una encuesta realizada por la asociación a los alojamientos turísticos de Portugal, debido a la cancelación de reservas al conocerse la huelga, según informa el medio local 'Journal de Negocios'. Los viajeros que más reservas cancelaron fueron Francia, Reino Unido y Brasil.
La huelga del 1 al 10 de mayo de los pilotos de TAP responde a las reivindicaciones de los pilotos de la aerolínea lusa, ante la próxima privatización de la aerolínea, entre las que destaca una participación de entre el 20% y 20% del capital, frente a la reserva del 5% para los trabajadores planteada en el diseño de la operación.
Está en venta el 61% del capital de TAP, que se disputan dos empresarios, ninguno de ellos portugués y uno de ellos, Efromovich, ya interesado en hacerse con la compañía tras su intento fallido de 2012.
PROCESO DE PRIVATIZACIÓN.
El Gobierno luso planteaba como fecha límite el 15 de mayo, para así culminar el intento de sanear la situación de la aerolínea lusa, admitiendo posteriormente que el precio sería más bajo del inicial, debido a los costes de reestructuración de la empresa.
Portugal ha anunciado que las ofertas finales para comprar TAP deberán presentarse antes del 5 de junio, según informa el diario luso 'Económico'.