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La jornada laboral y la masa salarial, los principales escollos
MADRID, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
El comité ejecutivo de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) ha decidido este lunes aplazar a finales de octubre la convocatoria de su asamblea nacional con el objetivo de avanzar en las negociaciones con ENAIRE (antes AENA), que se prolongarán durante todo el mes de octubre, según confirmaron fuentes del sindicato a Europa Press.
La junta directiva de USCA decidía hoy someter a sus afiliados convocar paros parciales durante la segunda quincena de octubre, en el caso de que las negociaciones no avanzaran.
A la espera de un "octubre negociador" el sindicato, que representa al 70% del colectivo, ha aplazado a finales de octubre la convocatoria de su asamblea nacional para decidir sobre eventuales propuestas en función de la evolución de las conversaciones.
El operador de Navegación Aérea, ahora denominado ENAIRE, denunció en octubre de 2013 el II convenio colectivo --dictado mediante el laudo arbitral de Manuel Pimentel emitido el 28 de febrero de 2011-- con el objetivo de negociar este año un nuevo convenio y llegar a un acuerdo antes del 24 de octubre.
La negociación entre ambas partes se bloqueó en un primer momento, según USCA, ante la negativa de ENAIRE a reconocer la ultraactividad indefinida del II convenio colectivo que recoge el laudo. USCA considera que la vigencia del laudo es indefinida hasta que no se firme un nuevo convenio, dado que la reforma laboral fue posterior al dictamen de Pimentel.
De no llegarse a un acuerdo antes de esa fecha, con la legislación laboral en la mano, se aplicaría el estatuto de los trabajadores o los convenios sectoriales por los que se rigen los trabajadores de las 13 torres de control liberalizadas.
ENAIRE ha planteado ahora al colectivo "buscar vías" para prolongar más allá de esa fecha la negociación, según el sindicato. Fuentes del ente señalan que la negociación "sigue abierta".
MASA SALARIAL Y JORNADA LABORAL, CLAVES.
Los controladores y ENAIRE no logran acercar posturas en los dos principales escollos de la negociación, en cuya mesa también está representado el Sindicato Independiente de Controladores Aéreos (SPICA).
La jornada laboral, que el ente quiere fijar en 1.690 horas anuales, y la masa salarial del colectivo, para la que el ente plantea una rebaja adicional del 20% enfrenta de nuevo a ambas partes. En 2010 los controladores vieron reducido su sueldo en un 40% de los 750 millones a los 480 millones.
USCA, que asegura que la masa salarial del colectivo ya se ha reducido más de un 20% en términos reales, planteó una congelación salarial y ante previsibles nuevos incrementos de tráfico, por tanto más ingresos, redistribuir ese remanente por concepto de productividad entre el colectivo.
La plantilla actual asciende a 2.294 controladores, incluidas las licencias especiales retribuidas, conocidas como LER, que permiten la prejubilación a los 57 años con el 75% del salario tomando como base el doble de la pensión máxima, y los RA (en reserva activa). Para 2015, la previsión es que alcancen los 2.280 efectivos.
"INSUFICIENTE" PLANTILLA.
La liberalización de las torres de control propició, según USCA, la entrada de 200 nuevos controladores una cifra similar al volumen de jubilados, por lo que en los últimos cuatro años la plantilla es similar e "insuficiente", sin previsión de convocatorias de nuevas plazas. "A igual número de controladores, igual masa salarial", defienden.
Ante el rechazo de la compañía a su propuesta, propusieron una reducción del 20% de la masa salarial con respecto a 2010 y su congelación en 2014 hasta la vigencia del futuro convenio en 2019.
Además, los controladores plantearon una reducción progresiva de la jornada laboral en cinco años hasta un nivel similar al resto de países de Europa (media 1.400 horas), lo que "evitará alcanzar el máximo de 80 horas extras" y permitirá renovar la "elevada" media de edad del colectivo (47 años).
No obstante, según el sindicato, tan solo se han llegado a acuerdos en cuestiones como el régimen disciplinario, el sistema de promoción profesional o en riesgos laborales.