MADRID, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
Costa Cruceros ha recortado en un 9,7% su consumo de energía, ha implantado iluminación LED en toda su flota y ha logrado en un 100% la separación de residuos, con una reducción del 3% en la huella de carbono de la compañía durante 2014.
Ambos cruceros serán los primeros cruceros de la industria (junto con los dos buques previamente anunciados para Aida Cruises, la marca alemana del Grupo Costa) propulsados con gas natural licuado, el combustible fósil más limpio del mundo, lo cual representa un gran avance medioambiental.
La naviera, que ha presentado hoy su informe de sostenibilidad de 2014 y su plan de responsabilidad social corporativa para los próximos años, será la primera naviera que navegue con los primeros barcos del mundo impulsados por Gas Licuado Natural (GNL), que espera recibir en 2019 y 2020.
Dividido en tres secciones --Sea, You, Tomorrow--, el informe destaca los principales resultados en materia de sostenibilidad registrados por la compañía, mientras que la sección final define los objetivos de Costa y su ruta para el futuro en términos tanto de producto como de innovación, así como el camino para un crecimiento sostenible.
Así, entre los principales resultados en el campo medioambiental, el documento cifra en un 9% la disminución en consumo de fuel por pasajero y día; una reducción del 3% en la huella de carbono de la compañía; y una reducción de emisiones equivalente a -4% en toneladas de SOx, y -7% en toneladas de NOx y PMx (gases típicamente producidos durante los procesos de combustión del fuel).
Además, ha instalado un Sistema de Limpieza de Gases de Escape para reducir las emisiones en siete barcos de la flota; y ha reemplazado las bombillas de luz existentes por lámparas LED de bajo consumo en todos los barcos de la flota, ya que se sustituyeron 450.000 bombillas, lo que resultó en un 80% de ahorro energético.
El documento también revela que el 100% de los materiales y productos consumidos a bordo se recogen y se separan para su eliminación y reciclaje; y logra una reducción del 1,36% en consumo de agua en los barcos, de la que el 68% se produce directamente a bordo mediante plantas especiales de desalinización, entre otros avances.