VALENCIA, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de Ministros ha dado luz verde este martes a la licitación de las obras de la terminal de contenedores de la ampliación norte del Puerto de Valencia, tal y como anunció el pasado jueves el ministro de Transportes, Óscar Puente. Con una inversión público-privada de más de 1.600 millones de euros, Terminal Investment Limited (TIL), del grupo MSC, construirá y explotará las instalaciones.
A propuesta del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, el Gobierno ha autorizado la licitación de las obras de construcción del muelle de contenedores de la terminal norte del Puerto de Valencia por un valor estimado de 656,7 millones de euros (IVA no incluido).
Se trata de una terminal de 5 millones de TEUS (contenedores equivalentes de 20 pies) de capacidad, que se añaden a los 7,5 millones de TEUS de capacidad actual, completamente electrificada con energía de origen 100% renovable, un área de depósito totalmente automático y una terminal ferroviaria adyacente de seis vías de 1.000 metros de longitud, que será la de mayor tamaño en España.
La nueva terminal pública de contenedores permitirá operar a los buques de última generación MEGAMAX, de hasta 430 metros de eslora y más de 24.000 TEUs (contenedores equivalentes de 20 pies).
La terminal norte de contenedores, que se ubicará en aguas abrigadas de la ampliación norte cuyas obras finalizaron en 2012, tendrá una superficie de unas 137 hectáreas y 1.970 metros de línea de atraque, con una capacidad para albergar cinco millones de contenedores.
La infraestructura contará con diseño, tecnologías y equipamiento de "última generación", una instalación totalmente electrificada que permitirá suministrar a los barcos y el objetivo es que el origen de su electricidad proceda al 100% de fuentes renovables. El 98% de la maquinaria de la Terminal será eléctrico y el 2% de hidrógeno, mientras que el origen de la electricidad será 100% de fuentes renovables.
El sistema de gestión ambiental será al máximo nivel (certificación EMAS). En su proyecto, TIL ofrece desarrollar una terminal ferroviaria dotada de 6 vías de 1.000 metros de longitud, con capacidad para mover 305.000 TEUs/año por ferrocarril.
La actuación, además, según ha subrayado el Ministerio, responde a los estándares "más avanzados a escala internacional" en materia de eficiencia, conectividad y sostenibilidad ambiental. Además, la ampliación prepara al puerto, que ya opera "cerca de su punto de saturación", para responder al crecimiento de la actividad y "seguir siendo una infraestructura de referencia" dentro del tráfico mundial de contenedores.
1.600 MILLONES DE INVERSIÓN TOTAL
Diseñado bajo un "esquema de colaboración público-privada", el proyecto contará con una inversión total de más 1.600 millones de euros. Mediante este contrato, la Autoridad Portuaria de Valencia se encargará de construir la infraestructura básica (dragado, muelle y relleno consolidado), mientras que la compañía TIL, de la naviera MSC, invertirá en la superestructura, instalaciones y material móvil.
Para el Gobierno, la ampliación es una "inversión estratégica a nivel nacional" con una "indudable repercusión económica en términos de generación de empleo y riqueza". Además, es "una apuesta decidida" por la descarbonización y por el ferrocarril como alternativa para el transporte de mercancías.
En este contexto, el Gobierno ha destacado que las inversiones del Ministerio en el Puerto de Valencia han permitido que haya ganado cuota de transporte de mercancías por ferrocarril "a lo largo de los últimos años". Todo ello, además, gracias a diversas inversiones y a otras que están en marcha y que han supuesto la movilización de 240 millones de euros en actuaciones ferroportuarias.
Por último, el Ministerio ha puesto en valor que la ampliación norte del Puerto de Valencia servirá "de palanca para un cambio hacia una movilidad más sostenible y con menos emisiones", dado que "reducirá el número de camiones en los accesos al puerto" y permitirá "descongestionar" las carreteras que rodean el área metropolitana de la ciudad de Valencia, como la V-30 como vía de entrada sur al Puerto. El objetivo es llenar los trenes con los camiones cerámicos con origen y destino Castellón, para reducir así los acarreos entre el Puerto y Font de Sant Lluís.
El Consejo de Ministros ha dado luz verde este martes a la licitación de las obras de la terminal de contenedores de la ampliación norte del Puerto de Valencia, tal y como anunció el pasado jueves el ministro de Transportes, Óscar Puente. Según la actualización de precios realizada este mes por la Autoridad Portuaria de Valencia, la terminal supondrá una inversión pública de 660 millones de euros, 118 millones más de lo presupuestado inicialmente debido al aumento de costes.
De la misma forma, el presidente de MSC España, Francisco Lorente, indicó que espera que se incremente cerca de un 20 o 25% el importe inicial de 1.050 millones de euros que aportará la empresa. Lorente avanzó que "sería un gran éxito" si la terminal pudiese empezar a recibir barcos dentro de cinco años.
El ministro Óscar Puente, tras anunciar la semana pasada que se aprobaría el proyecto, puso en valor que el Puerto de Valncia es el primero de España, el cuarto de la Europa y el número 20 del mundo, y, en ese sentido, subrayó la "importancia" del proyecto de la ampliación norte, porque la infraestructura "lleva tiempo trabajando en su banda de congestión".
La terminal norte de contenedores, que se ubicará en aguas abrigadas de la ampliación norte cuyas obras finalizaron en 2012, tendrá una superficie de unas 137 hectáreas y 1.970 metros de línea de atraque, con una capacidad para albergar cinco millones de contenedores.
UN AÑO PARA SU APROBACIÓN EN EL CONSEJO DE MINISTROS
La aprobación llega un año después de que el consejo de administración de la APV aprobase el proyecto constructivo. Desde entonces, la tramitación aguardaba el visto bueno final del Ejecutivo central, paso necesario al tratarse de una inversión pública superior a los 12 millones de euros.
Esta espera se ha enmarcado en un contexto en el que Sumar, parte del Gobierno, había manifestado su rechazo a la infraestructura en diversas ocasiones. De hecho, la portavoz de Compromís en el Ayuntamiento de Valencia, Papi Robles, afirmó el pasado jueves que ningún ministro de Sumar apoyaría el proyecto y la formación acudiría a los tribunales para paralizarlo.
La Comissió Ciutat-Port --que aglutina cerca de 200 organizaciones sociales y ecologistas-- también se ha movilizado en rechazo de esta infraestructura, y en una concentración la semana pasada que coincidía con el acto de anuncio del ministro, advirtió de "consecuencias ambientales, sociales y legales" de la ampliación, en referencia a que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid suspendió cautelarmente una resolución de marzo de 2021 del Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) que posibilitaba que la Autoridad Portuaria de Valencia pudiera decidir por sí sola acerca de la necesidad o no de una nueva evaluación ambiental para el proyecto.
Por su parte, el empresariado valenciano y el resto de partidos ha reivindicado ampliamente el desbloqueo del proyecto constructivo, defendiendo el impulso que supondría para las empresas exportadoras y la creación de empleo y riqueza que puede generar.
Así, el presidente de la CEV, Salvador Navarro, resaltó la visita del ministro en la que anunció que se aprobaría el proyecto como un "día histórico no solo para el Puerto en sí, que al final es una infraestructura al servicio de los ciudadanos, de la sociedad y las empresas", sino también importante para la ciudad de Valencia.