MADRID 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los trabajadores del área de Seattle (EEUU) de Boeing han rechazado la última propuesta de la compañía, que recogía una subida salarial del 35% en cuatro años, por lo que continúan con la huelga que iniciaron hace más de un mes, el pasado 13 de septiembre.
La propuesta fue votada este miércoles por los miembros del sindicato, la Asociación Internacional de Maquinista y trabajadores Aeroespaciales (IAM). De los 33.000 trabajadores en huelga, el 64% votó en contra de esta propuesta.
Aunque la oposición a esta propuesta es menor que el 94% que rechazó la proposición inicial de la compañía, no significa que el fabricante no tenga que hacer más esfuerzos para que los trabajadores decidan descontinuar la huelga.
Esta acción sindical es la más grande que ha vivido la compañía desde hace 16 años, cuando los empleados consiguieron la última subida salarial. Ahora, estos recriminan a la compañía que no haya actualizado los sueldos pese a la inflación y el aumento del coste de vida, por lo que exigen que el incremento sea de, al menos, el 40%.
Esta última propuesta de una subida del 35% se alcanzó gracias a la mediación de la Casa Blanca, ya que Boeing, en un principio, estableció en el 30% la subida máxima que aplicaría. En todo este contexto, la compañía también ha anunciado un recorte del 10% de la plantilla, lo que supondría la eliminación de unos 17.000 empleos.
Boeing presentó sus resultados del tercer trimestre este mismo miércoles. Así, anunció que sus pérdidas netas se triplicaron en los primeros nueve meses, hasta los 7.968 millones de dólares (7.398 millones de euros), un 260% más que los 2.212 millones de dólares (2.053 millones de euros) del mismo periodo de 2023, debido a la huelga.
Además, los resultados reflejaron también un menor volumen de entregas de aviones y los cargos anunciados previamente en programas comerciales y de defensa.
En este contexto, el consejero delegado del fabricante, Kelly Ortberg, ha admitido que "llevará tiempo" devolver a Boeing su antiguo legado, afirmando que, con el enfoque y la cultura "adecuados", puede volver a ser "una empresa emblemática y un líder aeroespacial".
"De cara al futuro, nos centraremos en cambiar fundamentalmente la cultura, estabilizar el negocio y mejorar la ejecución de los programas, al tiempo que sentamos las bases para el futuro de Boeing", ha indicado.