MADRID, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
En plenas vacaciones veraniegas siguen siendo muchos los viajeros que tienen dudas sobre el destino al que ir. Las alternativas son numerosas, especialmente en caso de residir en España. Ello es fruto no solo de los puntos atractivos repartidos por toda la geografía, sino también de lo bien ubicado que está. Y es que muchos países pueden visitarse sin necesidad de realizar un desplazamiento de gran duración. Un claro ejemplo es el de Italia.
Dentro del territorio italiano, una de las ciudades que más llaman la atención es sin duda alguna Milán. Y no es para menos, puesto que este municipio de casi un millón y medio de habitantes es sinónimo de variedad en estado puro. Así lo demuestra el hecho de que en él se sienten como en casa todo tipo de personas. Hoy profundizaremos en tres en concreto, empezando por los turistas.
LOS TURISTAS PUEDEN DISFRUTAR DE INFINITAS ACTIVIDADES MUY GRATIFICANTES
Lo primero que llama la atención a los turistas es la buena acogida que les dan los lugareños. A la amabilidad y simpatía propia de la sociedad italiana se suma el hecho de que los milaneses son conscientes de que una considerable parte de su PIB se debe a los ingresos por el turismo. Por ejemplo, muchos viajeros optan por alojarse en hoteles como el Meliá Milano.
Los gastos que llevan a cabo van más allá, abarcando también entradas de museos, contratación de actividades, comidas en restaurantes -de las cuales hablaremos más adelante- y un largo etcétera. Profundizando en las actividades, es destacable que las que pueden realizarse en Milán son muy variadas.
Culturizarse con la obra de Da Vinci, visitar la imponente catedral de Milán, hacer compras en la Galería Vittorio Emanuele II, adentrarse en las criptas que están ubicadas en una zona subterránea, ver un derbi Milán-Inter... la lista es amplísima, factor que da pie a que sean cuales sean los gustos de los turistas puedan verlos satisfechos al cien por cien.
La hospitalidad de los milaneses se evidencia de principio a fin. Indistintamente de los lugares a los que acuden los turistas, una sonrisa de oreja a oreja es dibujada en el rostro de cada persona que atiende a los viajeros, lo cual es de agradecer.
QUIENES DISFRUTAN DEL PLACER DE COMER ACABAN GOZANDO AL MÁXIMO DE LA EXPERIENCIA GASTRONÓMICA MILANESA
Son muchos los viajeros que, antes de decantarse por un destino u otro, deciden informarse sobre la gastronomía típica del lugar. En caso de que no les convenza, no dudan en optar por otra ciudad distinta. Cada vez más personas le dan al factor alimenticio la importancia que merece. Si también es tu caso, es muy probable que te sientas como en casa si finalmente te desplazas a Milán.
Nuevamente la variedad es sacada a colación, en este caso para hablar de platos típicos. No es fácil satisfacer los paladares de tantas personas distintas, pero la gastronomía milanesa lo logra poniendo a su disposición multitud de platos entre los que es posible elegir: ensalada caprese, bresaola, carpaccio tanto de carne como de pescado, frutti di mare, arancini y un larguísimo etcétera.
Conviene destacar el hecho de que se come bien tanto en los restaurantes en sí como en aquellos que forman parte de instalaciones hoteleras. Una buena muestra de ello es la del MaMì, cuyos sabores totalmente únicos pueden disfrutarse en el Meliá Milano, un Hotel lujoso para negocios o placer.
SI TE GUSTA LA MODA, MILÁN ES UN DESTINO IMPRESCINDIBLE PARA TI
Tanto mujeres como hombres de todas las edades se declaran amantes de la moda hoy en día, la cual cambia a un ritmo vertiginoso al darse forma a nuevas tendencias. ¿Sabías que muchas de ellas surgen en Milán? En efecto, siendo un destino que no pueden pasar por alto aquellas personas a las que les gusta dicho sector.
Una de las mejores épocas para viajar a Milán es sin ningún tipo de duda aquella en la que se celebra la Fashion Week. Básicamente se trata de una semana de la moda en la que los mejores diseñadores muestran al público sus últimas colecciones, las cuales destacan por ser sinónimas de innovación y alto nivel de calidad.
Ver la pasarela no es lo único que se disfruta siendo amante de la moda. Por supuesto, una actividad imprescindible es la de recorrer ciertas zonas comerciales que están repletas de tiendas de ropa para todos los gustos. A la galería anteriormente mencionada hay que sumar otros lugares indispensables como Via Torino y Corso di Porta Ticinese.
El ambiente en este tipo de zonas de moda es realmente bueno. Disfrutar de él al mismo tiempo en que se hacen compras en tiendas exclusivas de gran calidad es una experiencia que suele entusiasmar a muchos de los viajeros que eligen Milán como destino turístico, quienes pasan a sentirse como en casa.