Situaciones límite en la décima temporada de 'C.S.I Miami'

MADRID, 2 Jun. (OTR/PRESS) -

Ser jefe de los forenses no es fácil. Esto es algo que sabe muy bien Horatio Caine, que estará a punto de perder a uno de los miembros de su equipo más válidos, Calleigh, durante un tornado. Además será testigo de cómo otro miembro de su equipo, Ryan, será acusado de asesinato. La pericia del jefe de C.S.I., la vida de la experta en balística y el historial de Wolfe se verán empañados por amenazas externas ajenas a su control en la décima temporada de 'C.S.I. Miami', que Telecinco estrenará este lunes, a partir de las 22.15 horas.

En esta nueva temporada, dos estrellas internacionales y sex symbols de Hollywood, Bo Derek y Raquel Welch, dificultarán la labor de Horatio Caine: Bo será la enigmática propietaria de un centro ecuestre en el que se ha producido un asesinato, y Raquel encarnará a la carismática matriarca de un poderoso clan, investigado por el C.S.I. a raíz de los brutales asesinatos de varias prostitutas.

Esta vez, la serie girará en torno a una serie de brutales asesinatos a mujeres, lo que sembrará el pánico en la ciudad. El modus operandi del homicida en serie y las primeras evidencias del caso llevarán a Horatio Caine a investigar a un miembro de la familia Navarro, una poderosa familia de Miami con contactos de alto nivel que utilizarán su influencia para obstaculizar los avances del C.S.I. en el esclarecimiento del caso.

Paralelamente, el jefe de los forenses investigará un intento de asesinato, aparentemente ordenado por Memmo Fierro, antiguo enemigo de Caine y líder de la banda 'Mala Noche', que cumple condena en prisión tras se encarcelado por el jefe de los forenses.

En el primer episodio de la noche del lunes, Horatio logra salvar a Natalia y el C.S.I. inicia una carrera contrarreloj para localizar a los peligrosos fugitivos Jack Toller y Randy North. Los expertos forenses ponen en marcha un elaborado plan para conseguir que North salga del lugar en el que se oculta. Toller, por su parte, vende dos planchas grabadas para conseguir dinero en efectivo mientras fija su atención en su próxima víctima, una joven.

Posteriormente, el equipo liderado por Caine captura a Randy North y utiliza esta baza para atraer a Toller y así salvar a la chica que ha secuestrado. Sin embargo, Jack desaparece y los forenses se ven obligados a volver a examinar su historial criminal en busca de nuevas pistas que permitan dar con su paradero.

Ya en el segundo capítulo, el C.S.I. llega a una de las cabañas de un hotel privado para examinar el cuerpo de un hombre brutalmente asesinado. Mientras investigan los primeros indicios, los forenses descubren que la víctima es un gigoló profesional. Compañeros de profesión rivales, mujeres desesperadas y vírgenes de 30 años se convierten en los principales sospechosos del asesinato. El caso da un giro inesperado cuando Caine y su equipo descubren la inusual arma del crimen.