MADRID, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
Este martes 8 de agosto Dustin Hoffman cumple 80 años y TCM quiere felicitar a la estrella emitiendo tres películas de su amplísima filmografía: Cowboy de medianoche, que le valió una nominación al Oscar, Rain Man, por la que consiguió su segunda estatuilla como mejor actor, y Descubriendo nunca jamás, en la que encarna al productor teatral Charles Frohman.
"Muchas estrellas como John Wayne, Humphrey Bogart o Spencer Tracy
han tenido un estilo propio, pero yo he intentado desaparecer como persona y sorprender al público", asegura el actor. Quizá ese sea su gran secreto y su inigualable estilo.
Según Dustin Hoffman los directores de cine son una figura paterna. "Yo me peleé con mi padre desde que tuve uso de razón. Así que trabajar con los directores es como si estuvieras discutiendo todo el tiempo con tu propio padre". Así trata de justificar la cantidad de quebraderos de cabeza e interminables charlas que los realizadores de sus películas han tenido que aguantar durante los rodajes.
Dustin Hoffman siempre ha tenido fama de actor difícil, meticuloso, inseguro y, a veces, hasta desesperante, pero a cambio, en sus ya casi seis décadas de profesión, ha regalado al público interpretaciones inolvidables como las de Marathon Man, El graduado,
Kramer contra Kramer, Perros de paja o Tootsie.
TODO EMPEZÓ CON MIKE NICHOLS
En 1967, después de trabajar en varias series de televisión y en obras de teatro, le llegó su gran oportunidad. El director Mike Nichols lo eligió para dar vida a Ben Braddock, el joven a quien una madura Anne Bancroft intentaba seducir en El graduado.
El film fue un gran éxito, Dustin Hoffman consiguió la primera de sus siete nominaciones al Oscar. En la década de los 70 encadenó títulos como Cowboy de medianoche, Pequeño gran hombre, Papillon, Lenny o Todos los hombres del presidente.
En 1979 consiguió su primera estatuilla al mejor actor por hacer de un padre divorciado en Kramer contra Kramer. Un premio que volvió a obtener en 1988 por hacer de autista en Rain Man, un film que estuvo a punto de abandonar en pleno rodaje porque pensaba que estaba haciendo el peor trabajo de toda su carrera.
"Tengo unos demonios interiores que me hacen dudar y que me ha costado domar", reconoció hace años en una entrevista.
A sus 80 años sigue en primera plana. Los espectadores le acaban de ver en la serie de televisión Los Medici: Señores de Florencia y en el pasado Festival de Cannes, donde presentó The Meyerowitz Stories, dirigida por Noah Baumbach, a quien seguro también bombardeó con un sinfín de preguntas sobre su personaje.