El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, ha lamentado que las últimas noticias en torno a Gaza "no son buenas" ya que el plan Biden para acabar con el conflicto sigue sin aprobarse, aunque los mediadores y Estados Unidos, Qatar y Egipto insisten en que es posible "cerrar las brechas" que impiden sacar adelante ese acuerdo. "Estamos trabajando en ello, pero desgraciadamente, hoy por hoy, continúa la tragedia de Gaza y la violencia en el país", ha señalado Borrell a preguntas de los medios por las negociaciones en una rueda de prensa que ha ofrecido este lunes en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, donde dirige esta semana un curso titulado 'Europa entre guerras y elecciones'. El alto representante europeo ha repasado algunos de los conflictos actuales como el de Sudán, donde ha manifestado que las negociaciones de paz "tampoco avanzan mucho"; o el de Ucrania, en el que "de momento no hay negociaciones", porque "Putin no ha querido nunca negociar y de momento sigue sin quererlo". En todo caso, ha dicho que le preocupa más la situación en Oriente Medio, donde llevan "semanas" intentando que Israel y Hamás aprueben el plan de paz propuesto por el presidente estadounidense, Joe Biden, para la Franja de Gaza, que entre otras cosas contempla un alto el fuego, pero "sigue sin ser aprobado ni por unos ni por otros". "Mientras tanto, desgraciadamente, hay cada día más muertos en Gaza. Los rehenes siguen sin ser liberados, en West Bank hay cada vez más actos de violencia contra los poblados palestinos, colonos incontrolados que son incluso condenados por el propio Gobierno de Israel, bueno, condenados por el primer ministro pero jaleados por un par de ministros que no dejan de echar leña al fuego con sus declaraciones", ha lamentado. Es por ello que, como ha señalado Borrell, la Unión Europea respalda el plan Biden e insiste en la necesidad de un alto el fuego que permita canalizar la ayuda humanitaria, liberar los rehenes y buscar una solución política al conflicto.