El razonamiento jurídico efectuado por el instructor del 'procés', Pablo Llarena, con el que cambia el delito de sedición por el de desobediencia pero mantiene intacto el de malversación, abre la puerta a que la condena a 13 años de inhabilitación que el Tribunal Supremo (TS) impuso al ex vicepresidente catalán Oriol Junqueras se mantenga con leves ajustes. (Fuente: Europa Press / Generalitat de Catalunya / Consell per la República / Junts / Comisión Europea)