La celebración del Día Mundial de Agua se convierte cada año en una jornada de reflexión sobre el uso que hacemos. Proyectos hidráulicos como el Canal Sagarra-Garrigues cobran especial protagonismo en esta efeméride. Se trata de un canal que cubre 70.000 nuevas hectáreas de las comarcas de Lleida transformando cultivos de secano en cultivos de regadío. La comunidad de agricultores de esta zona ha apostado por el riego eficiente y se ha convertido en un ejemplo de sostenibilidad al hacer una gestión adecuada del agua. Para el sector, el riego eficiente tiene innumerables ventajas. El canal Segarra-Garrigues presenta una elevada eficiencia porque conduce el agua por cañerías cerradas a presión que no permiten pérdidas. Los agricultores utilizan un riego sostenible proporcionando a sus cultivos sólo el agua que necesitan. Además, emplean un riego por aspersión o goteo aprovechando hasta el 95 por ciento del agua. En definitiva, se trata de un sistema no sólo eficiente si no respetuoso con el medio ambiente. Pese a la eficacia de este sistema, con el agua siempre hay asignaturas pendientes.La campaña de riego 2016, que ha empezado recientemente, incorporará al proyecto una nueva zona de riego situada en Les Borges Blanques. El riego eficiente es la mejor garantía de futuro para el sector.